domingo, 7 de julio de 2013

Los peñistas están angustiados por el fantasma brasileño

Los peñistas están angustiados por el fantasma brasileño

7. julio, 2013 Álvaro Cepeda Neri * Conjeturas

Sube la marea mexicana de manifestaciones de protesta. Y los peñistas tratan desesperadamente de exorcizan al fantasma para que no los alcancen las revueltas que han tenido lugar contra el mal gobierno de Brasil. En el marco de la creciente inseguridad provocada por las delincuencias que no dejan de ensangrentar, secuestrar y desafiar a las instituciones, está angustiados los peñistas y temen que así como irrumpió la crisis de Brasil, cualquier día de estos estalle la rebelión de los 54 millones de mexicanos en la pobreza. Hay miedo en el peñismo. Y es que México tiene ya las condiciones sociales para ese estallido masivo. Y no se trata de un contagio, que las protestas no son una enfermedad, sino que se originan en la incapacidad de los gobernantes para resolver los alarmantes problemas básicos que tienen a la población contra la pared: desempleo, hambre, enfermedades y un largo etcétera.

El desastre social generado desde hace 24 años, cuando el neoliberalismo económico y las privatizaciones fueron el santo y seña del presidencialismo, es como para que en nuestro país, tras el empobrecimiento masivo, ya hubiera explotado la desesperación de los mexicanos y que esa crisis se hubiera adelantado a la de Gracia, España, Italia y no se diga a la de Brasil. Así como las fumarolas del volcán, las manifestaciones por todo el país han sido un desahogo; pero aún así los panistas quieren criminalizarlas proponiendo una reglamentación fascista. Y ante tal acumulación de problemas sociales, no tardan en multiplicarse las protestas y hacer contacto para desbordarse. Veinticuatro años de priísmoempanizado, rematados por el peñismo en 6 meses, tienen al pueblo en la miseria.

Hemos entrado ya a una recesión económica. Esto acelera el desempleo, la pobreza, el alza de los precios y una drástica baja del consumo. Y en una población de más de 118 millones de mexicanos, cerca de 100 millones que es el pueblo, o sea, el grueso de la sociedad, ya no resisten y piensan que no hay más que salir a las calles. Lo que ha sucedido en Brasil, aprovechando que estuvo en los ojos de todo el mundo, es un precedente, junto a lo de Chile donde los estudiantes luchan por una educación gratuita. Y aquí puede ser más devastadora una protesta por hambre, que presenta un panorama de puras promesas, cuando lo que se requiere son soluciones para hace años. Está en marcha esa crisis social.

No es de la noche a la mañana que se gestan los movimientos de protesta. Y en nuestro país llevamos ya 24 años de gobiernos contrarios a los intereses nacionales. Élites empresariales, bancarias, inversiones extranjeras de pisa y corre, políticos ladrones y una casta de millonarios se han estado apoderando de todo. Una oligarquía y una plutocracia son los dueños del país, mientras explotan inmisericordemente trabajadores. La economía informal ha contenido el estallido. Pero ésta ya está saturada de mexicanos al grito de ¡sálvese el que pueda! Lo que viene es el levantamiento masivo ya en gestación.

*Periodista

Fuente: www.contralinea.com.mx Periodismo de investigación http://contralinea.info/archivo-revista/index.php/2013/07/07/los-penistas-estan-angustiados-por-el-fantasma-brasileno/