Alianza Social de Trabajadores de la Industria Mexicana

lunes, 20 de mayo de 2013

Dinero- Nosotros ya no somos los mismos- Las manifestaciones magisteriales y las reformas

Dinero
Peña Nieto: evaluando su primer semestre
Precio de huevo, incontenible
¡Pobre gente de Milán!
Enrique Galván Ochoa
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Las mujeres de Baja California no han olvidado el compromiso que firmó el candidato Peña Nieto el 3 de junio del año anterior –la víspera de la elección presidencial– frente a una multitudinaria reunión en Tijuana. Fueron 10 puntos muy concisos, con una finalidad: mejorar la economía familiar. A unos cuantos días de que cumpla su primer semestre en Los Pinos, conviene recordar y evaluar cuáles de los compromisos ha cumplido y cuáles están pendientes. Ver gráfica al final.
Tropezón
Posiblemente la evaluación del primer semestre arroje más ‘‘noes’’ que ‘‘síes’’, pero podría argumentarse que seis meses es muy poco tiempo. ¿Qué posibilidades hay de que mejore Peña Nieto sus calificaciones el próximo semestre? Vean ustedes: la Secretaría de Hacienda acaba de anunciar un ajuste a la baja del crecimiento de la economía; eso se podría traducir en una disminución del gasto público. Incluso está pensando en echar mano del fondo de ahorro petrolero –alrededor de 27 mil millones de pesos. Existen otras opciones, una es prescindir de compras suntuarias, por ejemplo, el avión Dreamliner de Boeing. Nadie objeta que el Presidente, su familia e invitados viajen en un avión nuevo; el que heredó de Calderón despide cierto tufo irrespirable, pero no tiene que ser tan caro.
Huevo: no hallan solución
De acuerdo con un estudio de la Comisión Internacional del Huevo, en México se consumen 354 huevos por persona cada año, mientras que el promedio mundial en el año 2011 fue de 173. La estadística está cambiando en la medida en que el alto precio aleja el huevo de la mesa de los hogares mexicanos. En algunas regiones del país ha subido más de 100 por ciento. La crisis comenzó en la parte final del sexenio anterior; no pudo resolverla el secretario de Economía, Bruno Ferrari. Enfermó, tuvo que tirar la toalla. Uno de sus últimas decisiones fue abrir la frontera a la importación. Deberíamos estar bastante sobraditos de huevos. ¿Qué está pasando?
e@Vox Populi
Asunto: milanesa
Enrique: me refiero a la designación de Marisela Morales como cónsul de México en Milán. No se trata de denostar a la mencionada patriota por haber trabajado en el sexenio teporocho, sino porque su de-sempeño como procuradora de la República dejó mucho que desear y para mencionar sólo unos cuantos casos ahí está el general Ángeles y compañeros de infortunio. Por lo demás, con tal nombramiento el gobierno da a entender que con los panistas ‘‘haiga sido como haiga sido’’ existe un entendimiento para aplicar el borrón y cuenta nueva; claro, siempre y cuando los diputados y los senadores del PAN sigan apoyando las propuestas del PRI.
Mario Treviño/El Mante
R: ¡Pobre gente de Milán! Algo en que nadie ha reparado es que la célebre mafia italiana (la Camorra napolitana, la Cosa Nostra siciliana, la ‘Ndrangheta calabresa e incluso la Sacra Corona Unita de Apulia) lleva tiempo moviéndose al norte, es decir, a Milán. Y de pilón les llega doña Marisela.
Asunto: no es broma
¿Tendrá usted por casualidad el Twitter o buzón de algún funcionario del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (Issste) en Tampico, Tamaulipas? El martes pasado mi mamá acudió para hacerse su revisión anual ginecológica y lo primero que le preguntaron fue: ‘‘¿Edad?’’: ‘‘65 años’’, dijo ella, y le respondieron: ‘‘Lo sentimos, sólo tenemos reactivos para mujeres menores de 50 años ¡y ésas son las órdenes!’’ ¡Qué increíble! O sea, las mujeres de 51 años en adelante que se mueran, ¿o cómo? ¿Y de las cuotas descontadas puntualmente a mi señor padre no se puede utilizar una pequeña parte para que le hagan la revisión a mi mama?
Carolina Sánchez
/Tampico
R: ¡Por favor, dime que es una broma! ¿Cómo va a ser posible? Al paso que va el nuevo PRI se extrañarán los tiempos en que la profesora Gordillo manejaba el Issste. Te envío el buzón.
Twitter
La reducción de gasto público ¿incluirá compras de nuevo avión de EPN, del astillero gallego y el perdón de impuestos a TvRisa?
Francisco Correa @CorreaVillalobo
Grave que tres de los personajes más influyentes del país sean narcos. Grave que cárteles se hayan enquistado. Grave el silencio oficial.
¿Sabrá lo que es la canasta básica? Con eso de que no es la señora de la casa, ni sabe cuánto cuesta el kilo de tortilla.
Twitter: @galvanochoa
FaceBook: galvanochoa
Nosotros ya no somos los mismos
Vasconcelos y su cruzada educativa y cultural
Ortiz Tejeda
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José Vasconcelos convirtió los muros de los edificios públicos en páginas monumentales para que el pueblo reconociera su pasada grandeza y se empeñara en construir la propia
Foto José Carlo González
 
En la columneta anterior platiqué a grandes rasgos sobre un grupo de amigos que fue factor importante para que me aventurara a romper el cordón umbilical saltillense y me adentrara en las entrañas del monstruo llamado Distrito Federal. También relaté las motivaciones que impulsaron mi primera agresiva incursión al ámbito universitario. Desgraciadamente los correctores de la Redacción, que de tantas barbaridades me salvan cada semana, esta vez no se midieron: yo entrecomillé diversas citas de Vasconcelos, dichas o escritas en ocasiones muy diferentes, y ellos las unieron con comillas únicamente al principio y fin, lo cual dejó un galimatías incomprensible, por bellas que fueran las expresiones citadas. Ni modo, cerremos ese capítulo.
 
Ya dentro de la torre de rectoría buscábamos, sin saber qué exactamente, las pruebas del mal uso de los dineros del presupuesto. De haber existido, ¿qué clase de idiota las hubiera guardado en su escritorio, al alcance de todo el mundo? Desconcertados, no sabíamos qué hacer. Nunca entendimos que el objetivo (vigente desde endenantes) era provocar el escándalo mediático, y ya. Los periódicos, de la época (¿de la época?), se regodeaban con los ataques a la Universidad: apoyaban al gobierno permanente e incondicionalmente, pero la UNAM, además de autónoma, siempre ha sido (diositos quieran que lo siga siendo), la oveja descarriada de los regímenes, de cualquier color, que han gobernado el país.
 
Tenía horas apenas en la torre, cuando un chavo de las guardias me preguntó si yo era el que soy (en ese entonces lo era más todavía). Te hablan unos cuates en el basamento. Salí y me topé con el segundo grupo de amigos a los que hice referencia la vez pasada y que también me habían ofrecido su apoyo para que pudiera entrar a la UNAM, pagando el último año de prepa en exámenes a título de suficiencia. Ya dije también que política e ideológicamente eran las antípodas del equipo de Jorge Siegrits. Allí estaban Raymundo Ramos, Pedro Vázquez Colmenares y Alfredo Bonfil. Liberales, juaristas, militantes de la de pura cepa de la AJEF (como los lobatos en los escouts, estos son los masones junior), igual que Monsi y el amigo Manuel Jiménez Guzmán, cuyo indeclinable activismo es siempre tan intenso que uno llega a pensar que las logias aún guardan el poder de antaño, cuando en verdad hay fundadas sospechas de que se trata del Último (mohicano) masón que queda en el Valle de México.
 
Pues que esos Jóvenes Esperanza de la Fraternidad me echan montón y comienzan a mostrarme documentos, desplegados, actas, informes, balances y muchos etcéteras más, para demostrarme cómo el contador Thierry, profesionista del mejor nivel, ligado a organizaciones de la derecha extrema, durante años había avalado lo que ahora, por coyunturas políticas, denunciaba, que Siegrist recibía subsidios del gobierno argentino con los que, entre otras cosas, pagaba los manifiestos que yo firmaba, (cuestión que, por otra parte, me importaba un comino) y, lo más doloroso, las evidencias incontrovertibles del desastre ideológico en que se había convertido Vasconcelos ( El Desastre fue la tercera parte de su autobiografía). Me resistía a aceptar los hechos que estaban, incontrovertibles, frente a mi pero, íntimamente, la verdad dolía.
 
En plena Segunda Guerra, Vasconcelos editó la revista continental Timón, financiada por la embajada alemana y destinada a propagar y exaltar las ideas del nacionalsocialismo. Cuando en 1938 decidió finalizar su exilio y retornar al país era otro. Abiertamente exhibía su proclividad a los estados fascistas y su identificación con los regímenes totalitarios lo llevó, en los cincuenta, a manifestar su apoyo y simpatía a Franco, Perón y Batista. Retornó al fundamentalismo religioso de los tiempos en que vivió en mi terruño coahuilense y que yo tanto presumía, al grado de tomar el hábito de novicio de la Orden Tercera de San Francisco. Actitud del todo respetable si se le compara con sus afirmaciones: Hitler, aunque dispone de un poder absoluto, se halla a mil leguas del cesarismo. Hitler representa, en suma, una idea, la idea alemana, tantas veces humillada antaño por el militarismo francés y la perfidia de los ingleses. De su nueva militancia, no había duda y, si ésta hubiera existido, allí estaba el prólogo a la obra de Salvador Borrego, para confirmar, repito, El desastre.
 
Después de la regañiza caminé y caminé solo por las islas. Estaba totalmente confundido, dolido y tenía que tomar una decisión ya. No podía apartar de mi mente al hombre que electrizaba con sólo verlo, al que conmoví recitándole de memoria las razones del escudo y el lema universitario surgidos de su talento. Vasconcelos el revolucionario maderista, carrancista, obregonista, siempre critico, rebelde, autónomo. Vasconcelos codirector de El Antirreleccionista, miembro de la Convención de Aguascalientes, director de la Escuela Nacional Preparatoria, fundador del Ateneo de la Juventud, jefe del departamento Universitario y de Bellas Artes y rector de la Universidad Nacional. Vasconcelos, primer titular de la Secretaría de Educación, soñó una patria y sentó los cimientos para hacerla realidad. Lo hizo, como diría Raymundo Ramos, edificando con materiales de porvenir: convirtió los muros de los edificios públicos en páginas monumentales para que el pueblo (hoy llamado, la gente) se reconociera en su pasada grandeza y se empeñara en construir la propia. Aún encontramos en ellos los mensajes rotundos de Orozco y Rivera que estrujan, impactan, conmueven. Entusiasmados por el espíritu redentor de la cruzada educativa y cultural emprendida por Vasconcelos, llegaron a México los grandes de nuestro continente: desde Chile, Gabriela Mistral, y de República Dominicana, Pedro Henríquez Ureña. Alentado por el mesianismo del coahuilense Julio Torri quiso intentar el milagro de la multiplicación de los libros y emprendió la impresión gigantesca de una docena de títulos de los autores clásicos que hizo llegar a los lugares más remotos, fundó la revista El Maestro a la que incorporó a muchos jóvenes intelectuales de América Latina. En 1921, en nuestro país, apenas dos, cien mil mexicanos vivían en poblaciones urbanas (consideradas como tales, las que tenían más 15 mil habitantes), frente a 12, 300 mil que lo hacían en las zonas rurales. El analfabetismo alcanzaba 80 por ciento, evidentemente concentrado en estas últimas. Vasconcelos emprendió la magna tarea de comenzar a pagar deudas con los acreedores preferentes: campesinos e indígenas. Ese año echó a andar el proyecto de educación rural y las nobilísimas Misiones culturales, destinadas a abatir el analfabetismo y capacitar maestros.
 
Seguí deambulando y rumiando el desencanto. Vacío de propósitos, diría algún día Manuel Echeverría. De pronto pensé: ¿Y el joven Germán del Campo, caído mientras arengaba al pueblo en favor de Vasconcelos en el jardín de San Fernando, y López Mateos, Ciriaco Pacheco Calvo, (¿estaría vivo cuando el derrumbe?), Alejandro Gómez Arias, Mauricio Magdaleno, Andrés Henestrosa? Estos últimos me hicieron la distinción de estar en mi casa, pero no me atreví a profundizar en tema tan estrujante. (¡Dios mío! ¿Por qué no me hiciste un mínimo Scherer?). Sólo una convicción me quedó: para ellos, igual que para mí, no existió uno, sino dos, José Vasconcelos. A uno se le admira, al otro, ni recordar siquiera.
 
Regresé a la torre, reuní al grupo República de Chile y anexas y nos fuimos a la casa de la señora Adams, avalada como la mejor menudería del centro, por la presencia de cientos de taxistas todas las noches y madrugadas. Juntamos nuestros capitales y pedimos al centro de la mesa la porción que nos alcanzara de ese caldo, reparador como pocos.
 
Lo acontecido fue un golpe nada fácil de superar, a esa edad se tiene verdadera necesidad de guías, maestros, ejemplos. Menguaron, sí, los afanes heroicos y protagónicos y comenzó a formarse un sólido caparazón. Al paso del tiempo me he topado con muchos políticos, hombres de gobierno, líderes, funcionarios, curas, intelectuales, intérpretes de la opinión pública, señores del gran capital y señoras de la gran belleza que, con menos valimientos de toda índole que el Vasconcelos originario, han ascendido, triunfado, por la sencilla maniobra de cambiar, en trueque histórico, un potaje de lentejas, por su progenitura pero, después de lo relatado, estos me resultan simplemente peanuts, como diría Charlie Brown, o sea, simples cacahuates. Después de aquello, estoy blindado.
 
¿Se imagina usted a José Emilio, Monsi o Pitol, ocupando, haciendo un plantón en un recinto universitario? Entérese por el mismo precio.
Twitter: ortiztejeda
FUENTE: LA JORNADA
 La revolución panadera-Magú
Las manifestaciones magisteriales y las reformas

Víctor Flores Olea
No deja de ser significativo que, en tiempos próximos, los estudiantes del CCH y numerosos integrantes del movimiento del magisterio, sobre todo en algunos estados (Guerrero, Oaxaca, Michoacán y el Distrito Federal), se hayan manifestado enérgicamente contra de determinadas reformas que se han impuesto a sus planes de estudio o a su misma condición profesional y, sobre todo, tratándose del magisterio, que consideren represivas algunas de las medidas que contiene la actual reforma educativa, que abarca aspectos constitucionales y contra la cual se han pronunciado de manera agresiva y destructiva.
 
Desde luego, nos pronunciamos enérgicamente, de nueva cuenta, contra los procederes violentos, tanto por lo que hace a los estudiantes del CCH que tomaron por la fuerza locales universitarios y, desde luego, por lo que hace a grupos importantes del magisterio guerrerense que han destruido locales educativos y sedes de los principales partidos políticos nacionales (en Chilpancingo). Para empezar, tales procedimientos han sido netamente contraproducentes respecto de sus fines, ya que la opinión pública más general está masivamente en su contra, sobre todo porque los principales medios informativos del país han presentado tales actos violentos como causa de un desprestigio que se ha difundido grandemente. Acciones y escándalo público prácticamente imposibles de refutar. Las razones del magisterio, si en verdad han sido elaboradas, han quedado en gran medida sepultadas bajo la visión de un proceder injustificado que se ha difundido ampliamente.

Pero claro, hay diferencias: la UNAM decidió escuchar a los disidentes (aunque después éstos han roto temporalmente las pláticas), lo cual supone de algún modo reconocer que, de todos modos, las protestas del CCH probablemente tienen razones que no sería inútil escuchar y valorar.

En el caso del magisterio nacional la situación es diferente, porque, además de coyunturas apaciguadoras provisionales, no se abre un espacio real para que tales sectores del magisterio expongan sus razones. Creo que es un error de los gobernantes y que, en todo caso, deben también estar abiertos a los argumentos de los maestros disidentes. Tal sería una oportunidad no sólo de escuchar, sino de reflexionar acerca de sus posibles razones. Y algo más general: vivimos en el país un momento en que no es posible simplemente dictar reformas y decisiones sin un intercambio a fondo con los afectados. Opino que tal apertura sería favorable para conocer a fondo las razones de la disidencia y de recoger aquellos aspectos que pudieran ser razonables, valga la redundancia. Sería oportunidad única para conocer a fondo la condición del magisterio y sus reales problemas y aspiraciones.

Y esto, además, porque la revisión de los diarios nacionales no permiten adelantar demasiado en el conocimiento de los motivos de la disidencia de estos grupos, aunque una somera investigación en la red nos ha permitido tener una visión más cabal de esos asuntos.

Por lo que hace a la famosa evaluación del magisterio, que parecen rechazar tajantemente los disidentes, lo hacen porque en efecto parece diseñada para que florezcan las decisiones unilaterales y la arbitrariedad en la preservación de los contratos de trabajo o no. En realidad, parece que estarían dispuestos los maestros a una evaluación en que participen autoridades, jefes de familia y los mismos estudiantes. Seguramente complicado pero no imposible. ¿Su mérito?: eliminaría la eventual arbitrariedad unilateral.
 
Una serie de disidentes alegan que las modificaciones educativas que se han realizado en las décadas recientes han llevado a las escuelas a abandonar la formación patriótica y humana en niños y jóvenes para supeditarse cada vez más a la racionalidad económica y a intereses político-electorales de los partidos. No existe un proyecto de engrandecimiento y de desarrollo social y cultural del pueblo mexicano que sea el punto de referencia para orientar las acciones educativas.
 
Algo que apenas es explícito en estas discusiones es que en la reforma se ha optado por la estandarización de una enseñanza que, sostienen los disidentes, debería tender, al contrario, a fomentar la diversificación y la polivalencia intelectual y profesional. En esto coinciden los disidentes de muchas partes del mundo respecto a las pretensiones de una educación a modo para las empresas, con el peligro de una educación mercantilizada que atienda más a intereses económicos que a los educativos, y que llegue a ser en realidad (sobre todo en los estudios de nivel superior) una cantera para las grandes empresas, dejando de lado la formación y el desarrollo humanos. Es decir, se intenta una estandarización que se olvida de las necesidades locales y regionales de un país tan diversificado como México. Aquí se uniría a la protesta la de los disidentes del CCH.
 
Según los más variados disidentes de la reforma, los planes y programas educativos, los sistemas de evaluación del aprendizaje, las formas de organización y gestión escolar, infraestructura, recursos y materiales didácticos, el vínculo escuela-comunidad, la salud y nutrición de estudiantes y docentes, las condiciones laborales y salariales, la participación de estudiantes, docentes y padres de familia en las decisiones educativas fundamentales, debieran estar presentes en toda reforma educativa digna de ese nombre, lo cual no parece haberse realizado en las últimas reformas educativas del país (tampoco en 2013) que ponen en serio peligro el nivel real de la enseñanza en México.
 
No es posible, pues, aplicar verticalmente y desde arriba una reforma educativa que no considere el conjunto de elementos anteriores para que, en verdad, cumpla sus cometidos educacionales de calidad. Nuevamente diré que vivimos en un país que no soporta ya reformas en ningún aspecto que no hayan sido plenamente consultadas con los interesados, y esto vale para la educación, o para las finanzas o para las privatizaciones en muchos aspectos, como la energética. No bastan los criterios de moda o los difundidos por ciertos especialistas que realmente no han pensado en el futuro del país, o lo han hecho superficialmente.
 
Tales son las desventajas y desventuras peligrosas a que lleva la velocidad de los cambios que quiere ser rasgo central del gobierno de Enrique Peña Nieto.
FUENTE: LA JORNADA

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