Alianza Social de Trabajadores de la Industria Mexicana

jueves, 27 de octubre de 2011

Peña Nieto y sus disfraces- ASTILLERO- La última y ¿nos vamos?

Astillero
La última y ¿nos vamos?
Obuses emplazados
Discriminación patronal
Sócrates el tonto
Julio Hernández López
Foto
TRANSPARENCIA EN EDUCACIÓN SUPERIOR. Rafael López Castañares, secretario general de la Asociación Nacional de Universidades e Instituciones de Educación Superior, y Esthela Damián Peralta, presidenta de la Comisión de Educación, ayer durante la entrega de los estados financieros auditados IES públicas-ANUIES, en el auditorio del edificio E de la Cámara de DiputadosFoto Francisco Olvera
M
ichoacán es la postrera apuesta fraccionada antes de entrar al premio mayor de la ruleta del Casino Patrio. No pudo ser el estado de México el palenque plenamente indicativo del rumbo que podrían tomar las cosas en 2012, así que ya solamente queda el proceso de sucesión de Leonel Godoy para tratar de encontrar claves. Por lo pronto allí está la obsesión del hermano Felipe en hacer gobernadora a la hermana Luisa María casi al costo que sea, volcando presupuesto y burocracia pinoleras en apoyo del plan familiar, con las fuerzas federales desplegadas para garantizar que se cumpla lo que la superioridad ordene. En otra parte del retablo, el candidato del PRI, Fausto Vallejo, en pleno ejercicio asistencial de ayuda en efectivo a futuros electores, con dinero sin vías de contabilidad ni control alguno, en una entidad surcada por ríos de billetes recién lavados.
Si Michoacán es augural, a nadie deberá sorprender el desmantelamiento institucional que trata de dar paso a la creciente tentación de inhabilitar la pista electoral en busca de opciones de emergencia programadas desde la enloquecida torre de control. La última, sí, pero no necesariamente nos vamos. Apenas pase Michoacán y ya estarán los obuses mayores emplazados: del lado de blanco y azul, con el delfín pinto o con el carnal colorado, pero el bando de Los Pinos cree fundadamente necesario dar continuidad a sus proyectos bélicos y de presunta modernización, al costo que sea. Los Dinos, o neodinos, con el figurín de moda listo para acumular más horas-pantalla, y la izquierda desfigurada en espera de milagros de recomposición que no llegan.
Los priístas cierran filas, genéticamente programados para disciplinarse en torno a proyectos más o menos aceptables de repartición de la riqueza política (y presupuestal) disponible. Contra lo que algunos vaticinaban, en especial las cúpulas del panismo, Manlio Fabio Beltrones dio su calculada bendición desde el senado a los zurcidos hechos en San Lázaro por la bancada peñanietista en materia de normativa política. Lo que se cayó en el camino de los escaños a las curules habrá de considerarse como pérdida colateral que, en todo caso, podría colocarse como espectáculo inaugural de las consultas ciudadanas que mucha imaginación y entusiasmo necesitarán para prender, tan condicionadas como acabaron en la letra legal definitiva.
Beltrones ni siquiera amaga con sacar hacha de guerra y deja todo al tiempo, mientras la parvada que se enganchó con el tema de la relección sigue empeñada en que los mexicanos crean que es de mucho mundo teórico y académico proponer que los legisladores que la gente ya no aguanta en sus periodos actuales pudieran seguir de largo hasta por un sexenio más, sin que esa continuidad esclerótica represente un retroceso sino un avance. Por fortuna, aunque no necesariamente por buenas razones consecuentes, la aplanadora peñanietista, con el aval del jefe Beltrones, ha dejado ese punto de la relección inmediata para mejores tiempos, en una presunta consulta cívica que San Plutarco Elías Calles de Atlacomulco habrá de definir más delante.
Más que por las propuestas y las definiciones en positivo, el mapa electoral se va delatando por los no que pronuncian algunos de sus principales personajes. Santiago Creel, por ejemplo, rechaza abiertamente cualquier posibilidad de alianza desde el PAN con el gordillismo panalista, en caso de que él sea el candidato presidencial. Otros aspirantes, acaso considerándose con probabilidades más altas de alcanzar esa nominación, y por ello esperanzados en contar con las brigadas de adulteración magistral de la profesora, casi se pelean por contar con los favores de la reina de la transacción política bien tasada.
Los patrones confederados del país, por voz de Gerardo Gutiérrez Candiani, dicen que no les parece suficiente lo que en discurso les fue a decir Andrés Manuel López Obrador en pasada comparecencia por orden alfabético de los principales precandidatos presidenciales. Con un aire discriminatorio, los miembros de la Coparmex, según su dirigente formal, requieren que el tabasqueño mande señales muy claras de que no está en contra del sector privado y de que aprecia lo que éste ha hecho por el bien del país. En cambio, a Enrique Peña Nieto no le piden que pase por ningún detector de mentiras oratorias, pues les fascinó que el ex gobernador del estado de México se mostrara cercano a las tesis patronales, en especial en lo referente a la apertura de Pemex al sector privado. Se certifican discursos y se sopesan intenciones, debería inscribir aunque fuera en letras chiquitas la mencionada central de patrones en las cartas de invitación a personajes para que desglosen sus planes de trabajo ante sus excelencias facciosamente suspicaces.
Astillas
El candidato en campaña por la pospresidencia de la República, Carlos Salinas de Gortari, ha calificado de tonto al ex gobernador de Nuevo León, Sócrates Rizzo, por haber dicho frente a estudiantes coahuilenses en febrero de este año que las más altas autoridades del país organizaban durante el priísmo el tráfico de drogas para que no afectara la paz social. Siendo parte involucrada en esas declaraciones, el ex presidente las descalificó rotundamente y aseguró que él, el licenciado Salinas, no conoció ningún gobierno que practicara esos entendimientos como política de Estado... Arrojar la cabeza provisional de un lobo (el delegado en Gustavo A. Madero que encabezó la reciente obstrucción de entrega de papelería electoral) a los leones bejaranos no parece ofrecer garantía de que las hostilidades internas del sol azteca se apacigüen en el segundo intento de realizar elecciones de consejeros en varias entidades, sobre todo en la joya de la corona que es el Distrito Federal... Y, mientras ha sido condenado en Argentina a cadena perpetua Ricardo Miguel Cavallo, quien estuvo a punto de ser límpido director en México del Registro Nacional de Vehículos, ¡hasta mañana, con la SRE dando tranquilidad al precisar que allí bien se sabe lo que los agentes gringos hacen en México!
Twitter: @julioastillero
Facebook: Julio Astillero
 
Peña Nieto y sus disfraces
Adolfo Sánchez Rebolledo
El precandidato Cordero se esfuerza por presentarse como la opción ante Enrique Peña Nieto, favorito de los dueños del poder económico y mediático del país o, al menos, de sus representantes más conspicuos. En una inesperada respuesta a la aclamación de los empresarios a Peña en Querétaro, reclamó los derechos de autor del PAN sobre la idea de abrir Pemex al capital privado, planteada y recibida con una ovación clamorosa durante la reunión del Consejo de Hombres de Negocios, que hoy encabeza Miguel Alemán, hijo del ex presidente del mismo nombre y a quien, con justicia histórica, debiera adjudicarse el primero de los intentos serios de compartir la empresa petrolera saltándose la Constitución de la República.
La queja de Cordero, reiterada luego por el propio presidente Calderón, así como las acusaciones de mezquindad lanzadas en las últimas horas contra los priístas, expresan la situación patética de debilidad o desventaja en la que se halla el partido de la derecha de cara a la sucesión presidencial.
La tragedia del PAN, si es que se puede hablar de ese modo, es que el poderoso lobby empresarial cuyos favores reclama ya no lo ve como solución, sino como parte del problema, tras dos sexenios de mediocridad económica y enrarecimiento de la vida política. Aunque Calderón se ha esforzado por satisfacer las exigencias de los que quieren una oportunidad para enriquecerse en el terreno energético, es obvio que, para los grandes capitales, nada de lo conseguido hasta hoy resulta suficiente. Eso explica que estemos en presencia de una ofensiva para imponer la apertura total promovida dentro y fuera del país, pues, como acertadamente escribió en este diario David Márquez Ayala, son demasiadas voces al mismo tiempo y en el mismo tono para ser una casualidad.
Tal estrategia tiene varios objetivos inmediatos de gran calado que se concentran en dos consignas primarias: conseguir la mencionada privatización del sector energético, incluso sin negar la propiedad de la nación sobre los hidrocarburos y la derogación de las disposiciones que hoy limitan la mercantilización de la política mediante los medios de comunicación masiva.
En un sentido general se busca enterrar los últimos vestigios del viejo proyecto constitucional de desarrollo para entrar, pese a las evidencias negativas de la crisis internacional, en un proceso de recomposicion capitalista sin los obstáculos interpuestos por los tabúes derivados de la ideología subsistente (como caricaturescamente la concibe el pragmático ex gobernador del estado de México), pero sin definir con claridad los postulados del nuevo Estado, que seria gobernado sin medias tintas por los intereses privados, gracias a una presidencia fuerte capaz de lidiar con los efectos perturbadores de la creciente desigualdad social.
Peña Nieto, que en esta materia no es todo el PRI, cree decir algo nuevo, pero, en realidad, repite de viva voz y como promesas todo aquello que sus interlocutores quieren escuchar, como si leyera un guión escrito con ese fin. Ante los dueños de la radio y la tv no tuvo más oferta que hacer del Estado un seguro escribiente de sus pretensiones. Lo suyo no es, como se quiere hacer ver, mera, pero imposible restauración; tampoco un nuevo pacto social y político, sino la recreación del acuerdo para la modernización ensayado con los descalabros conocidos durante casi cinco sexenios, subrayando, como añadido indispensable, la urgencia de un gobierno fuerte que imponga orden, eficacia, sobre un Estado debilitado y sin proyecto de futuro. En otras palabras: pura ideología, continuidad con resabios autoritarios a cuenta del supuesto sentido común de sus patrocinadores.
Los empresarios que horas después aclamaron a Lula por su intervención en el foro de Querétaro no sacaron, sin embargo, la leccion principal: para avanzar en el mundo globalizado de hoy se requiere una política propia, no subordinada a los intereses de fuera. Sólo a partir de esa perspectiva nacional con fuerte respaldo es que se puede pensar cómo preservar y fortalecer el patrimonio en la globalización, que es, hay que decirlo, una globalizacion en crisis, en lugar de buscar el enriquecimiento súbito de unos cuantos a costa de la mayoria como gran palanca para el desarrollo.
México, advirtió Lula, es un país muy grande para contentarse con solamente estar mirando hacia el norte. Pero eso es exactamente el camino seguido por nuestras elites. Y es ahí donde se empantanan las propuestas de Peña Nieto, quien, antes de ser nombrado candidato, quiso dejar en claro a quiénes representa, aunque Acción Nacional se sienta excluido del arreglo.
Las pasarelas de los días recientes han sido muy útiles para identificar qué se juega en la sucesion presidencial de 2012, así como para descartar la idea de que entre el PAN y el PRI cupular hay grandes diferencias programáticas. Ahí están los discursos para comprobarlo. Pero también deberían servir para afianzar la necesidad que tiene la izquierda de profundizar en su oferta, estimulado la convergencia y descartando la simplificación que todo lo reduce a las candidaturas, cuando está en disputa el presente inmediato, pero tambien el futuro de este país.
PD. ¿Y el PRD? En lo suyo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario