Peña, el ex puntero. AMLO, al frente

Mientras tanto, al ex puntero en los sondeos sobre la intención del voto a nivel nacional, Enrique Peña Nieto, se le siguen enredando los hilos que lo mueven, ayudado por la utilización de los aparatos burocráticos
El decidido avance de Andrés Manuel López Obrador en los índices de intención del voto a nivel nacional canceló los acuerdos cupulares de una transición tranquila y negociada entre la administración panista de Felipe Calderón, y los integrantes de la nomenklatura priísta que respalda a Enrique Peña Nieto, quienes ante el cambio de escenario unen esfuerzos mediáticos para frenar y tratar de descarrilar al candidato de las izquierdas. Mientras el mexiquense se ve cada día más desesperado, al ser desinflada su imagen televisiva por el embate de los jóvenes universitarios agrupados ahora en el movimiento “#yosoy132” y también, hay que señalarlo, por los ataques de Josefina Vázquez Mota y Felipe Calderón Hinojosa, la abandera presidencial del PAN está ya fuera del contexto real de la competencia electoral. En contraste, Andrés Manuel López Obrador se manifiesta más seguro en su triunfo y se concentra en alinear a sus ejércitos ciudadanos para movilizarse el próximo primero de julio, salir masivamente a votar y, sobre todo, cuidar las urnas para impedir que se cometa un fraude electoral.
El embate en lo que es conocido popularmente como “guerra sucia”, lleva al abanderado del Movimiento de Renovación Nacional a llamar a sus seguidores y simpatizantes a prepararse para los ataques contra su creciente figura política y para impedir la intentona de hacer otro fraude electoral para imposibilitarle ganar la Presidencia de la República. Como parte de una especia de “calentamiento” se ha observado la participación de Andrés Manuel López Obrador en su encuentro con conductores y alguno que otro periodista que trabajan para Televisa y que de siempre han manifestado su abierta simpatía e inclinación por el candidato del PRI, Enrique Peña Nieto. A ciencia cierta no puede asegurarse que sus inclinaciones sean auténticas y menos aún puede atribuírseles mérito alguno en el lugar que ocupa el abanderado tricolor dentro de las encuestas, ya que solamente se limitan a seguir instrucciones de quienes sí pretenden y tienen con que considerar que su poder llega al extremo de pasar por encima de la voluntad popular y anticiparse a imponer a un Ejecutivo federal. Al cierre de estas líneas desconocíamos cual sería tanto el inicio como el final de este encuentro, sin embargo y dadas las circunstancias, las acciones y las opiniones vertidas en los pasados tres días, por poner un tiempo reciente, no es difícil adivinar cuáles fueron las posturas.
No tuvo que pasar mucho tiempo para que las reacciones se vieran en cadena y se emprendiera una brutal arremetida tanto de priístas como de panistas en contra del tabasqueño. Sin embargo y sin ninguna muestra de amilanamiento, López Obrador insta a los seguidores y simpatizantes a no bajar la guardia, a dar el último jalón y defender el voto. Para efectos de estos ataques que hemos visto se desmenuzan las palabras del de la izquierda y se les dan diversas interpretaciones. El hecho de que mencione que se está cocinando un fraude es visto por estos mismos locutores y comentaristas con los que se reunió esta noche como la llamada a reaccionar de manera violenta si los resultados del primero de julio no le son favorables. Parece que no hay nada más alejado de la realidad y en este bombardeo, tal y como lo hemos venido señalando, se comete error tras error.
Al hacer referencia al fraude del 2006 sobre el cual muchos mantenían severas dudas no está sino sintetizando una verdad que desde hace años nos vienen mostrando las propias autoridades electorales. Primero fue el ex presidente del IFE, Carlos Ugalde, quien abierta y públicamente confesó que las acciones de Vicente Fox si habían influido en el proceso, como en el presente ha sucedido con las de Calderón. Ha sido el propio guanajuatense con su declaración de adhesión a Peña Nieto y su llamado al voto útil el que dejó al desnudo dos temas: el primero tiene que ver con el acuerdo o pacto o concertación hecha con el gobierno tricolor de entonces encabezado por el propio Carlos Salinas de Gortari, herido de muerto por Ernesto Zedillo para que fuera el elegido en el cambio de estafeta que ya había comprometido incluso en EU para dar la imagen de un país demócrata.
El segundo expone sus grandes temores, sus miedos, ante la posibilidad de que con aquellos con los que hizo el acuerdo y a los que indiscutiblemente les cumplió originando con ello la etapa de mayor impunidad en la historia de México, resulten derrotados y en el cambio se inicien averiguaciones, se concluyan investigaciones como las que dieron origen al cateo de su rancho y pueda llegarle tanto a él como a su familia directa y a la política, incluyendo a la Martita, el brazo ejecutor de la justicia. Esto aderezado con el respaldo a las investigaciones que en el vecino del Norte se le siguen a uno de sus hijastros. Pero ahí no terminan las cosas ya que basta también con observar detenidamente las disposiciones del IFE y su adormilamiento cuando se presentan quejas y denuncias en contra del PRI o del mismo PAN para darse cuenta de que los dados están, de nuevo, cargados y más a la vista desde el momento de la aprobación de consejeros y del propio presidente de ese instituto.
Y no se sabe a ciencia cierta cuánto daño pueden hacerle realmente al tabasqueño ya que, por ejemplo, al hablar de la frase “al diablo con esas instituciones” parece que se vio, como dice Jorge Saldaña, muy tibio. Porque cuando tenemos en las manos, a través de los medios, referencias que casi son pruebas de la corrupción que existe en los sindicatos, en las pocas paraestatales que quedan, en dependencias como, incluso, el Instituto Nacional de Migración, que permanece impávido y deja seguir funcionando como si nada se hubiese denunciado al ferrocarril al que llaman “la bestia” y que “acarrea” indocumentados. Ese “al diablo” muchos lo convertirían en un “a la chingada”. O ¿usted las necesita, las quiere, deben seguir tal y como se encuentran? Podríamos ir así una a una y serían muchas las que seguirían el mismo derrotero.
Ya no inspira temor el que hagan esa propaganda porque la misma gente dice y repite una y otra vez que ya no puede aguantarse que se siga con los mismos métodos, con iguales abusos, con el saqueo, con todo ello que, sabemos, necesitamos debe irse a otro lado. Así pues está por un lado el programa de anoche –al que debiera escribirle de esta noche-, pero también los anuncios y habrá que ver hasta donde es cierto que tanto tricolores como blanquiazules preparan los textos de sus respectivos abanderados para atacar notoriamente a López Obrador.
Algunos consideran que de ser así será una reedición de la forma en la que se comportaron tanto el tabasqueño como la defeña con el mexiquense, o sea que “juego que tiene desquite, ni quien se fije”; aunque, visto de esa manera, es la garantía absoluta de que el “puntero” cambio de nombre y de partido ya que en el primer encuentro se trataba de bajar a Peña y tan han cambiado los números que ahora hay que dañar a AMLO. En que quedamos, ¿no que sus encuestas son verdaderas? ¿Si hay esa ventaja tan grande para qué lanzar ataques? ¿Será que aprovechan para no exhibir que serán la continuidad más segura del panismo y por lo tanto del esquema económico que ha hundido y empobrecido al país y a sus habitantes?
Lo que ya es un hecho es la promesa que les ha llegado a diversos líderes panistas y a quienes tienen influencia entre los militantes sobre la participación que podrían tener en el gobierno de ganar Peña Nieto la Presidencia. El mando no sería entregado únicamente a cabezas priístas sino que hay lugar para todos. Incluso este tipo de argumentos ya llegaron hasta los oídos de Josefina Vázquez Mota; en el caso de Gabriel Quadri se abren interrogantes ya que él, como dicen en mi pueblo, “las fue a dar sin que se las pidieran”. Por lo pronto, el mexiquense ve con gusto que le siguen garantizando el voto de los petroleros, con todo y el escándalo protagonizado por Carlos Romero Deschamps y su primogénita no lo movieron de la lista de candidatos plurinominales. Así, igual con todos los que tienen en su haber gran experiencia en cochupos, corrupción, fraudes y abusos.
Por eso, López Obrador demanda con firmeza a los consejeros electorales del Instituto Federal Electoral (IFE), que preside Leonardo Valdez, que garanticen que las elecciones sean limpias, “pero parece que están dormidos”. Más que “dormidos”, los consejeros electorales están muy atentos al rumbo que ha tomado el proceso comicial presidencial y parece que el panorama no los satisface del todo. El consejero presidente del IFE salió ante los micrófonos para responder a los señalamientos de López Obrador al rechazar que existan elementos de “guerra sucia” –como lo denuncia el tabasqueño- o “fraude” hacia la elección del 1 de julio. El funcionario federal rechazó que el IFE se haya conducido con una actitud tibia y sostuvo que cumple con su función, en particular ante el contenido de los spots de los partidos políticos. Para fundamentar sus aseveraciones, Valdez citó que del 30 de marzo al 27 de mayo, de 102 mil 300 piezas monitoreadas, 28 por ciento corresponden al PAN, 23 por ciento al PRI-PVEM, y un porcentaje igual a la coalición de partidos de izquierda, movimiento ciudadano.
El presidente del IFE fue más allá en esta posición y siguió exhibiéndose al recordar que los partidos políticos pueden acudir ante la Comisión de Quejas y Denuncias de ese órgano electoral para presentar los recursos que consideren pertinentes, no sin destacar que “no se puede frenar la crítica dura”, la campaña de confrontación, “pero lo que no podemos permitir es que se use denigración o calumnia en la propaganda de los partidos políticos”. En el mismo sentido se expresó el consejero electoral Lorenzo Córdova, quien calificó como “venturoso” que existan mecanismos institucionales para procesar pacífica y jurídicamente la conflictividad propia de la contienda electoral.
Mientras tanto, al “ex puntero” en los sondeos sobre la intención del voto a nivel nacional, Enrique Peña Nieto, se le siguen enredando los hilos que lo mueven, “ayudado” por la utilización de los aparatos burocráticos de investigación e impartición de justicia a favor de la causa partidista de Acción Nacional. Luego de desligarse y deslindar a su partido del ex gobernador de Tamaulipas, Tomás Yarrington, ahora el ex gobernador mexiquense advirtió en el puerto de Tampico, que no se prestará a la complicidad o encubrimiento de sus compañeros del PRI que falten a la ley. El candidato de la coalición Compromiso con México llamó también a sus adversarios a respetar el resultado de elección del 1 de julio próximo, y que no se convoque al encono, la división o la violencia. Pidió una actitud civilizada y madura, así como de respeto a la ley, cuando concluyan las elecciones.
En tanto, la Procuraduría General de la República (PGR) practicaba 30 cateos en distintas oficinas y propiedades que pertenecen a los ex gobernadores de Tamaulipas, Tomás Yarrington Ruvalcaba y Eugenio Hernández Flores, así como de 10 personas más que son investigados por México y Estados Unidos por presuntamente lavar dinero del narcotráfico. Los cateos se realizaron en Quintana Roo, Tamaulipas y el Distrito Federal, en cuyos inmuebles personal de la Subprocuraduría de Investigación Especializada en Delincuencia Organizada (SIEDO) aseguraron documentación y equipo de cómputo, entre otros objetos. Fuentes de la PGR destacaron que existen mas órdenes de localización y presentación contra otras personas que son investigadas, como el empresario Farough Fatemi Corcuera, de quien se presume es prestanombres de Yarrington.
Contra los exgobernadores aún no se ha solicitado orden de presentación. Sobre el particular, el ex gobernador Eugenio Hernández Flores negó tener vínculos con la delincuencia organizada así como con los tamaulipecos que son investigados por autoridades federales de México y Estados Unidos. Tras el cateo de tres de sus propiedades, dijo estar de acuerdo en que se le investigue, pero no con que se le difame antes de ser juzgado. Veremos, pues las investigaciones apenas inician.
Lilia Arellano - Opinión EMET
La última etapa de la elección presidencial 2012

Encuesta del periódico REFORMA. En este ambiente de efervescencia, uno de los medios escritos más influyentes del país publicó una encuesta que a contrario sensu de la mayoría de las mediciones de opinión
En este escenario de la contienda por la Presidencia de la República, sobre el último mes del proceso electoral, intento explicar los últimos tres eventos que ocasionaron un importante reacomodo de las principales fuerzas políticas. En primer lugar, debo aclarar que un escenario no es un pronóstico; es una interpretación –entre otras distintas y válidas– del día a día, que con la información disponible (siempre finita e imperfecta) intenta escudriñar el presente para tratar entrever algunas tendencias que permitan atisbar el futuro inmediato.
En el mes de mayo ocurrieron varios acontecimientos que dieron un vuelco a la contienda electoral por la Presidencia de la República, que sugería una amplia y segura victoria del candidato del PRI, Enrique Peña Nieto. El primer lugar de la lista lo ocupa el error en la Universidad Iberoamericana del abanderado priísta, magnificado por su equipo más cercano de colaboradores, el cual originó el movimiento social conocido como #Yosoy132. En segundo lugar, la encuesta publicada por el diario REFORMA cambió la percepción de que Peña Nieto era invencible. En tercer lugar, el deterioro de la economía mundial que aceleró y amplió la devaluación del peso.
1) El movimiento social #Yosoy132. Un acto fortuito trastocó la percepción de la justa electoral: Peña Nieto asistió a la Universidad Iberoamericana a un evento proselitista, y al terminar su presentación hubo gritos de algunos estudiantes en contra de la forma de cómo se comportaron las policías en Atenco; Peña regresó, tomó el micrófono para contestar a las protestas y dijo que asumía la responsabilidad de los hechos y que había usado la fuerza pública como recurso para preservar el orden y la paz pública. Ahí se inició su debacle: el priísta olvidó que los jóvenes de la Ibero están bien informados y son afines a las luchas por los derechos sociales. Se inician las protestas.
Todo pudo haber quedado en un desaguisado. Pero la cúpula del PRI, en un intento por controlar daños, dijo que los protestantes no eras estudiantes de la Ibero sino acarreados, porros, sediciosos… La respuesta de los muchachos fue contundente: un grupo de 131 universitarios mostraron en un video su credencial de la universidad y lo circularon en las redes sociales. La protesta devino en movimiento.
En pocos días se conformó un amplio movimiento de protesta social por la manipulación de la información en las campañas presidenciales por las televisoras y otros medios de comunicación, así como en contra del candidato presidencial del PRI. Por vez primera en la historia del país se organiza un movimiento de protesta contra un candidato. La explicación más plausible de este fenómeno es que a raíz de las respuestas a los universitarios que dieron Peña y el PRI, un amplio sector de la sociedad, en particular los jóvenes informados, cayó en la cuenta que tanto el PAN como el PRI son parte del mismo régimen, y que con cualquiera de los dos partidos habría continuidad (Lorenzo Meyer). Es un rechazo a 12 años del PAN y a que regrese el PRI, “que sería lo mismo, más autoritarismo”.
2) Encuesta del periódico REFORMA. En este ambiente de efervescencia, uno de los medios escritos más influyentes del país publicó una encuesta que a contrario sensu de la mayoría de las mediciones de opinión dio un virtual empate técnico entre Peña Nieto y Andrés Manuel López Obrador (aunque cabe destacar que la mayoría de las casas encuestadoras señalan una persistente caída de las preferencias electorales en pro el candidato del PRI). El historial de aciertos de este diario en las últimas cinco elecciones es de 40%; no obstante, su encuesta tuvo la virtud de modificar las percepciones de que Peña era imbatible e invulnerable. Se reactiva la puja electoral.
De este modo, las elecciones se polarizan entre Peña Nieto y López Obrador. Este evento puede animar a los electores a votar, al tiempo que se puede presentar el fenómeno del voto útil, que consiste en darle el voto a uno de los dos punteros: unos apostarán a que el otro no gane la presidencia y viceversa. Malas noticias para el PRI, pues el abstencionismo lo favorece. Además, según REFORMA, el voto útil beneficia a AMLO. También es importante resaltar que los puntos negativos de López Obrador se han reducido significativamente, mientras que han subido sustancialmente los de Peña. A este entorno de mayor competitividad de López Obrador contribuye la crisis del PAN (Vicente Fox y Manuel Espino abogan por Peña) y la expectativa de un triunfo arrollador del Dr. Miguel Ángel Mancera en el DF.
Un efecto de la combinación de todos los sucesos mencionados es que en este último mes de campaña subirán de tono las denuncias contra los candidatos punteros, por lo que crecerá considerablemente el escrutinio hacia Enrique y Andrés Manuel. Todo ello en espera de la respuesta de Josefina Vázquez Mota y de Felipe Calderón ante un posible hundimiento de la candidata del PAN. La guerra sucia apenas inicia. En tal entorno, el último debate, programado para el próximo domingo puede ser crucial para definir la carrera por la Presidencia.
3) La crisis internacional y la devaluación del peso. La economía mexicana ha mostrado un sólido desempeño en lo que va del año, pese a la agudización de los problemas económicos de Europa, en particular de España y de su banca, que está muy vinculada a Bancomer y a banco Serfin. Pero en las últimas semanas el alto riesgo de un colapso financiero de España, que afectaría a todo el mundo, ha golpeado severamente al peso, que ha perdido alrededor de 33% de su valor, comparado con enero de este año. Además, hay otros nubarrones que amenazan a México, a saber: la sequía y la desaceleración de la economía de los Estados Unidos.
La caída del peso tiene un efecto casi inmediato en los consumidores: encarece los alimentos (que en el último año ya se han incrementado más de 80%), toda vez que México importa cerca de 70% de su consumo de comida. La sequía, en cambio, tiene una menor importancia en la crisis alimentaria, puesto que ha afectado principalmente las tierras de temporal, en su mayoría cultivadas por campesinos que producen para el autoconsumo. Sin embargo, sí tiene un enorme impacto social, pues incrementa la pobreza y la emigración hacia las ciudades, ya que está virtualmente cerrada la frontera con Estados Unidos, por la escasez de empleo y por lo peligroso, complejo y caro que resulta emigrar hacia el país vecino.
En cuanto a la desaceleración de la economía estadunidense, este factor no tendrá un efecto inmediato que pudiera incidir en el proceso electoral federal. Por ende, los elementos que sí pueden perturbar las tendencias electorales son la devaluación del peso, el consecuente encarecimiento de los alimentos, así como otros productos (por lo que subirá la inflación) y la migración interna, suceso que tiende a adquirir estatus de crisis social, y más tarde podría ser un ingrediente fundamental para desencadenar una crisis política.
¿Qué consecuencias tendría la devaluación del peso y el incremento de los precios de los alimentos en las elecciones presidenciales? En un primer momento, puede favorecer al candidato de las izquierdas (movimiento progresista), ya que abonaría a favor de sus tesis de concentración de la riqueza y del poder, que cierran las oportunidades productivas y laborales. Una primera reacción de los electores puede ser de enojo contra el gobierno y el régimen, pero si se agudiza la crisis puede ser de incertidumbre y de recelo. En días, el sentimiento popular puede pasar del enfado al temor y convertir el apoyo hacia la izquierda en rechazo, en particular si se emprende una campaña de miedo. ¿Ocurrirá este cambio en menos de 30 días?
En dicha estrategia para suscitar miedo, los especuladores pueden ser un factor electoral anti-AMLO si aceleran la salida de capitales aduciendo que un gobierno populista agravaría el desplome del peso. Según el Banco de México, en el primer trimestre de este año ingresaron 25 mil millones de dólares de capital golondrino. Ello significa que en un abrir y cerrar podría salir del país ese dinero, y mucho más invertido en instrumentos líquidos, causando una fuerte depreciación, alza de tasas de interés, pánico y una crisis financiera.
En conclusión, la revuelta juvenil, la encuesta del periódico REFORMA y el ahondamiento de la crisis financiera internacional reintroducen el elemento de incertidumbre en el proceso electoral y eliminan la idea de que la elección presidencial ya estaba decidida.
Ergo, ningún candidato puede cantar victoria. En tal coyuntura, el mayor desafío de AMLO es incrementar la confianza que empieza a recuperar, pues se intensifica la campaña que lo tilda de peligro para México. “Frente a ello –sostiene con tino Manuel Camacho en su columna semanal de EL UNIVERSAL–, nada mejor que la mesura, la templanza, la determinación sincera de respetar a los diferentes, a los adversarios, de dar garantías a todos. De pensarse en definitiva como jefe de Estado y no como jefe de ninguna facción, por muy legítima que sea” (04/06/12). Su apuesta debería ser por legalidad y orden.
En cuanto a Peña Nieto, debe evitar otro resbalón como el de la Ibero y preparar un gran obús para el debate contra su principal adversario para intentar noquearlo, a la vez que salir bien librado de las posibles bombas que le preparen sus contrincantes. Y por lo que respecta a Josefina Vázquez Mota, su oportunidad se la brinda la crisis financiera (si logra vincular al PRI con las devaluaciones) y su capacidad para acrecentar los escándalos de los ex gobernadores priístas, presuntamente vinculados con la mafia. Aunque un escenario de caída libre del PAN podría dar pie a un pacto con las izquierdas.
Este aire fresco que trajo la incertidumbre al proceso electoral mexicano también puede incidir en las elecciones para diputados federales y senadores. En primer lugar, se desvaneció el escenario que daba por descontado al PRI “el carro completo” en ambas cámaras. Y, en segundo lugar, la combinación de la devaluación del peso más la sequía, la emigración y el alza de los alimentos podría traducirse en votos contra los candidatos priístas (la sequía afecta a la región más priísta) si sus opositores realizan una buena campaña.
En suma, la elección federal (presidente y legisladores) está por definirse: todavía no hay nada seguro para ningún partido.
hector_barragan@hotmail.com
En el mes de mayo ocurrieron varios acontecimientos que dieron un vuelco a la contienda electoral por la Presidencia de la República, que sugería una amplia y segura victoria del candidato del PRI, Enrique Peña Nieto. El primer lugar de la lista lo ocupa el error en la Universidad Iberoamericana del abanderado priísta, magnificado por su equipo más cercano de colaboradores, el cual originó el movimiento social conocido como #Yosoy132. En segundo lugar, la encuesta publicada por el diario REFORMA cambió la percepción de que Peña Nieto era invencible. En tercer lugar, el deterioro de la economía mundial que aceleró y amplió la devaluación del peso.
1) El movimiento social #Yosoy132. Un acto fortuito trastocó la percepción de la justa electoral: Peña Nieto asistió a la Universidad Iberoamericana a un evento proselitista, y al terminar su presentación hubo gritos de algunos estudiantes en contra de la forma de cómo se comportaron las policías en Atenco; Peña regresó, tomó el micrófono para contestar a las protestas y dijo que asumía la responsabilidad de los hechos y que había usado la fuerza pública como recurso para preservar el orden y la paz pública. Ahí se inició su debacle: el priísta olvidó que los jóvenes de la Ibero están bien informados y son afines a las luchas por los derechos sociales. Se inician las protestas.
Todo pudo haber quedado en un desaguisado. Pero la cúpula del PRI, en un intento por controlar daños, dijo que los protestantes no eras estudiantes de la Ibero sino acarreados, porros, sediciosos… La respuesta de los muchachos fue contundente: un grupo de 131 universitarios mostraron en un video su credencial de la universidad y lo circularon en las redes sociales. La protesta devino en movimiento.
En pocos días se conformó un amplio movimiento de protesta social por la manipulación de la información en las campañas presidenciales por las televisoras y otros medios de comunicación, así como en contra del candidato presidencial del PRI. Por vez primera en la historia del país se organiza un movimiento de protesta contra un candidato. La explicación más plausible de este fenómeno es que a raíz de las respuestas a los universitarios que dieron Peña y el PRI, un amplio sector de la sociedad, en particular los jóvenes informados, cayó en la cuenta que tanto el PAN como el PRI son parte del mismo régimen, y que con cualquiera de los dos partidos habría continuidad (Lorenzo Meyer). Es un rechazo a 12 años del PAN y a que regrese el PRI, “que sería lo mismo, más autoritarismo”.
2) Encuesta del periódico REFORMA. En este ambiente de efervescencia, uno de los medios escritos más influyentes del país publicó una encuesta que a contrario sensu de la mayoría de las mediciones de opinión dio un virtual empate técnico entre Peña Nieto y Andrés Manuel López Obrador (aunque cabe destacar que la mayoría de las casas encuestadoras señalan una persistente caída de las preferencias electorales en pro el candidato del PRI). El historial de aciertos de este diario en las últimas cinco elecciones es de 40%; no obstante, su encuesta tuvo la virtud de modificar las percepciones de que Peña era imbatible e invulnerable. Se reactiva la puja electoral.
De este modo, las elecciones se polarizan entre Peña Nieto y López Obrador. Este evento puede animar a los electores a votar, al tiempo que se puede presentar el fenómeno del voto útil, que consiste en darle el voto a uno de los dos punteros: unos apostarán a que el otro no gane la presidencia y viceversa. Malas noticias para el PRI, pues el abstencionismo lo favorece. Además, según REFORMA, el voto útil beneficia a AMLO. También es importante resaltar que los puntos negativos de López Obrador se han reducido significativamente, mientras que han subido sustancialmente los de Peña. A este entorno de mayor competitividad de López Obrador contribuye la crisis del PAN (Vicente Fox y Manuel Espino abogan por Peña) y la expectativa de un triunfo arrollador del Dr. Miguel Ángel Mancera en el DF.
Un efecto de la combinación de todos los sucesos mencionados es que en este último mes de campaña subirán de tono las denuncias contra los candidatos punteros, por lo que crecerá considerablemente el escrutinio hacia Enrique y Andrés Manuel. Todo ello en espera de la respuesta de Josefina Vázquez Mota y de Felipe Calderón ante un posible hundimiento de la candidata del PAN. La guerra sucia apenas inicia. En tal entorno, el último debate, programado para el próximo domingo puede ser crucial para definir la carrera por la Presidencia.
3) La crisis internacional y la devaluación del peso. La economía mexicana ha mostrado un sólido desempeño en lo que va del año, pese a la agudización de los problemas económicos de Europa, en particular de España y de su banca, que está muy vinculada a Bancomer y a banco Serfin. Pero en las últimas semanas el alto riesgo de un colapso financiero de España, que afectaría a todo el mundo, ha golpeado severamente al peso, que ha perdido alrededor de 33% de su valor, comparado con enero de este año. Además, hay otros nubarrones que amenazan a México, a saber: la sequía y la desaceleración de la economía de los Estados Unidos.
La caída del peso tiene un efecto casi inmediato en los consumidores: encarece los alimentos (que en el último año ya se han incrementado más de 80%), toda vez que México importa cerca de 70% de su consumo de comida. La sequía, en cambio, tiene una menor importancia en la crisis alimentaria, puesto que ha afectado principalmente las tierras de temporal, en su mayoría cultivadas por campesinos que producen para el autoconsumo. Sin embargo, sí tiene un enorme impacto social, pues incrementa la pobreza y la emigración hacia las ciudades, ya que está virtualmente cerrada la frontera con Estados Unidos, por la escasez de empleo y por lo peligroso, complejo y caro que resulta emigrar hacia el país vecino.
En cuanto a la desaceleración de la economía estadunidense, este factor no tendrá un efecto inmediato que pudiera incidir en el proceso electoral federal. Por ende, los elementos que sí pueden perturbar las tendencias electorales son la devaluación del peso, el consecuente encarecimiento de los alimentos, así como otros productos (por lo que subirá la inflación) y la migración interna, suceso que tiende a adquirir estatus de crisis social, y más tarde podría ser un ingrediente fundamental para desencadenar una crisis política.
¿Qué consecuencias tendría la devaluación del peso y el incremento de los precios de los alimentos en las elecciones presidenciales? En un primer momento, puede favorecer al candidato de las izquierdas (movimiento progresista), ya que abonaría a favor de sus tesis de concentración de la riqueza y del poder, que cierran las oportunidades productivas y laborales. Una primera reacción de los electores puede ser de enojo contra el gobierno y el régimen, pero si se agudiza la crisis puede ser de incertidumbre y de recelo. En días, el sentimiento popular puede pasar del enfado al temor y convertir el apoyo hacia la izquierda en rechazo, en particular si se emprende una campaña de miedo. ¿Ocurrirá este cambio en menos de 30 días?
En dicha estrategia para suscitar miedo, los especuladores pueden ser un factor electoral anti-AMLO si aceleran la salida de capitales aduciendo que un gobierno populista agravaría el desplome del peso. Según el Banco de México, en el primer trimestre de este año ingresaron 25 mil millones de dólares de capital golondrino. Ello significa que en un abrir y cerrar podría salir del país ese dinero, y mucho más invertido en instrumentos líquidos, causando una fuerte depreciación, alza de tasas de interés, pánico y una crisis financiera.
En conclusión, la revuelta juvenil, la encuesta del periódico REFORMA y el ahondamiento de la crisis financiera internacional reintroducen el elemento de incertidumbre en el proceso electoral y eliminan la idea de que la elección presidencial ya estaba decidida.
Ergo, ningún candidato puede cantar victoria. En tal coyuntura, el mayor desafío de AMLO es incrementar la confianza que empieza a recuperar, pues se intensifica la campaña que lo tilda de peligro para México. “Frente a ello –sostiene con tino Manuel Camacho en su columna semanal de EL UNIVERSAL–, nada mejor que la mesura, la templanza, la determinación sincera de respetar a los diferentes, a los adversarios, de dar garantías a todos. De pensarse en definitiva como jefe de Estado y no como jefe de ninguna facción, por muy legítima que sea” (04/06/12). Su apuesta debería ser por legalidad y orden.
En cuanto a Peña Nieto, debe evitar otro resbalón como el de la Ibero y preparar un gran obús para el debate contra su principal adversario para intentar noquearlo, a la vez que salir bien librado de las posibles bombas que le preparen sus contrincantes. Y por lo que respecta a Josefina Vázquez Mota, su oportunidad se la brinda la crisis financiera (si logra vincular al PRI con las devaluaciones) y su capacidad para acrecentar los escándalos de los ex gobernadores priístas, presuntamente vinculados con la mafia. Aunque un escenario de caída libre del PAN podría dar pie a un pacto con las izquierdas.
Este aire fresco que trajo la incertidumbre al proceso electoral mexicano también puede incidir en las elecciones para diputados federales y senadores. En primer lugar, se desvaneció el escenario que daba por descontado al PRI “el carro completo” en ambas cámaras. Y, en segundo lugar, la combinación de la devaluación del peso más la sequía, la emigración y el alza de los alimentos podría traducirse en votos contra los candidatos priístas (la sequía afecta a la región más priísta) si sus opositores realizan una buena campaña.
En suma, la elección federal (presidente y legisladores) está por definirse: todavía no hay nada seguro para ningún partido.
hector_barragan@hotmail.com
Héctor Barragán Valencia - Opinión EMET

No hay comentarios:
Publicar un comentario