Cinco choferes con poder: desde el “Nico”, de AMLO, hasta el “Don Arturo”, de Romero Deschamps

Por: Redacción / Sinembargo - julio 22 de 2013 - 0:00De revista, México, TIEMPO REAL, Último minuto - 14 comentarios

 

Ciudad de México, 22 de julio (SinEmbargo).– Su función es transportar a políticos a donde ellos quieran o necesiten ir, pero han saltado a la fama no por ser unos ases del volante, sino por el hecho de trabajar como choferes y percibir sueldos de funcionarios de alto rango, vivir en la opulencia o hasta tener influencias.

Personajes como “Nico”, ex chofer del ex candidato presidencial de la izquierda, Andrés Manuel López Obrador, o Paulino Cruz Sánchez, ex empleado de quien fuera Secretario de Gobernación, Fernando Gómez Mont, aparecían en nómina como Subsecretario y subdirector de área, respectivamente, percibiendo salarios muy por encima de algunos profesionistas. En ambos casos sus jefes justificaron su sueldo.

Pero hay otros choferes, como Enrique Merlín García, que utilizan el poder de sus patrones para hacer de las suyas. Este hombre trabaja para una Diputada priista del Edomex, hecho que, según su ex pareja, fue determinante para separarla de sus hijos.

En tanto, Uriel Sánchez Barrios, ex trabajador de José Manuel Saiz Pineda, ex Tesorero de Tabasco, tenía en su domicilio todo tipo de artículos de lujo y hasta contaba con un seguro de gastos médicos tipo premiere.

En México ser chofer de un político es una posición que paga bien y, en casos como estos, también da poder.

“NICO”

Pese a su política de austeridad, durante el mandato de Andrés Manuel López Obrador como Jefe de Gobierno del Distrito Federal (2000-2005), el chofer de su Tsuru blanco, Nicolás Mollinedo Bastar, ganaba hasta cinco veces más que un doctor con 40 años de experiencia.

“Nico”, como es conocido popularmente, también fungía como coordinador de la Unidad de Apoyo Logístico de la Jefatura de Gobierno, apareciendo en la nómina capitalina como Subsecretario con un sueldo de 62 mil 997 pesos, tan sólo 3 mil 877 pesos menos que el político tabasqueño.

López Obrador justificó las ganancias de su chofer argumentando que él y otros de sus colaboradores tenían puestos homólogos.

También dijo que “Nico” desquitaba bien su salario, pues se levantaba a las cuatro y media de la mañana, se acostaba a medianoche y prácticamente no descansaba, por eso se le pagaba más.

Foto: Especial

“DON ARTURO”

Es empleado del líder petrolero y Senador priista, Carlos Romero Deschamps.

El pasado domingo 14 de julio el periódico Reforma publicó que “Don Arturo”, como es conocido en el Hipódromo de las Américas, destina hasta 30 mil pesos en una tarde para apostar en carreras de caballos.

Según el rotativo, el chofer de Deschamps llega al mencionado recinto con fajos de billetes de 500 mil pesos para apostar en carreras simultáneas tanto de hipódromos de Estados Unidos como en el mexicano.

Se va a una mesa, analiza sus jugadas y con plumón azul palomea a los caballos. Si decide apostar, llama a uno de los empleados y le informa sobre su elección.

“Nunca nos da el dinero en la mano, siempre nos avienta los billetes (…) sabemos que es de Pemex, del sindicato, es bueno para jugar”, expresó uno de los encargados de las ventanillas de apuestas.

También reveló que da buenas propinas cuando sus caballos le responden: de 500 a mil pesos.

En el Senado de la República se han obstaculizado todos los intentos para obtener información sobre este hombre.

ENRIQUE MERLÍN GARCÍA

Chofer de Norma Ponce Orozco, Diputada federal por el Partido Revolucionario Institucional (PRI) y ex Regidora de Ecatepec, Estado de México.

El 5 de julio medios locales revelaron que este hombre se valió de tráfico de influencias para separar a sus dos niños de su madre y obligar a ésta a pagarle pensión alimenticia.

La afectada, Verónica Valderrama Ruiz, aseguró que Merlín García ganó un juicio encabezado por los abogados de la legisladora.

La mujer señaló que su ex esposo y su ex cuñada, Carla, son el chofer y la asistente de la Diputada, por lo que se dicen “intocables” pues supuestamente gozan de la protección total de la funcionaria.

Verónica Valderrama narró que desde el año pasado su ex esposo comenzó a trabajar como chofer y un día, simplemente, la corrió de su casa y no le permitió ver a sus hijos.

Narró que el 24 de agosto del 2012 fue privada de su libertad, hecho por el que posteriormente se dirigió a la visitaduría general de los derechos humanos de Ecatepec para interponer su queja, a la que le dieron “carpetazo”. 

URIEL SÁNCHEZ BARRIOS

Ex chofer del ex Tesorero de Tabasco, José Manuel Saiz Pineda.

Durante las investigaciones por presunto peculado de cerca de 20 mil millones de pesos y los 88.5 millones de pesos decomisados en mayo en una finca relacionada con el ex Gobernador, Andrés Granier Melo, y su Tesorero, la casa de Sánchez Barrios fue cateada y resultó con menaje de alto valor comercial.

La policía estatal halló en el domicilio, ubicado en el Fraccionamiento Santa Fe, de Villa Parrilla, electrodomésticos de alto valor comercial, pantallas de 50 por 80 pulgadas, cámaras internas de seguridad en diferentes puntos, muebles de caoba y otros objetos que difícilmente podría haber pagado con sus ingresos.

Además, en el interior de la propiedad se encontró un vehículo Dodge, Advenger, color plata.

Al siguiente día, de acuerdo con Tabasco Hoy, un empleado del banco HSBC acudió al domicilio para notificarle a Sánchez Barrios que debía renovar su seguro de gastos médicos mayores tipo premier, del que sólo contratan clientes selectos con cuentas importantes y servicio internacional.

La casa del chofer. Foto: Tabasco Hoy

PAULINO CRUZ SÁNCHEZ

Empleado del ex Secretario de Gobernación Fernando Gómez Mont.

En septiembre de 2009, El Universal reveló que Cruz Sánchez tenía años trabajando como chofer de Gómez Mont, motivo por el cual percibía un sueldo como subdirector de área de la Secretaría de Gobernación (Segob), es decir, 23 mil pesos mensuales más prestaciones.

En tanto, María Elena Valdez Montoya, secretaria privada del entonces funcionario, ganaba 42 mil 933 pesos más prestaciones al estar contratada como directora de área.

Además de su sueldo, ambos empleados tenían derecho a cinco seguros distintos, prima de antigüedad y pago de hasta 2 millones 500 mil pesos a cargo del Gobierno federal por “responsabilidad frente a terceros”.

Gómez Mont no desmintió esa situación, se limitó a decir que se trataba de pagos por una función laboral.