Alianza Social de Trabajadores de la Industria Mexicana

jueves, 24 de mayo de 2012

Combatiré la pobreza, ofrece López Obrador a oaxaqueños- No habrá pactos con el narcotráfico, dice AMLO al llamado de Calderón- ¿De qué se quejan?-

Elecciones 2012
Indígenas de la costa le dan cálida recepción en Puerto Escondido
Combatiré la pobreza, ofrece López Obrador a oaxaqueños
El país está en ruinas y la reconstrucción será difícil, advierte
Foto
Andrés Manuel López Obrador, candidato presidencial de la coalición Movimiento Progresista, durante su gira por Puerto Escondido, Oaxaca
Foto Carlos Ramos Mamahua
Roberto Garduño
Enviado
Periódico La Jornada
Jueves 24 de mayo de 2012, p. 13
 

Puerto Escondido, Oax., 23 de marzo. El sol de medio día pegaba con fuerza sobre la multitud de zapotecos, mixtecos, chatinos y collantes (oaxaqueños de raza negra) que escuchaban con interés a Andrés Manuel López Obrador cuando advertía sobre la urgencia de reconstruir el país.
No vamos a estar perdiendo el tiempo, habiendo tanto que hacer. El país está en ruinas; se esmeraron en destruir a México y nos va costar mucho trabajo reconstruirlo y levantarlo.
Sobre la candente arena del campo de futbol de la unidad deportiva de Puerto Escondido, el candidato de la coalición Movimiento Progresista se comprometió a trabajar, como presidente de la República, con seriedad; no se perseguirá con afanes mediáticos y mucho menos se apelará a la venganza.
No vamos a estar perdiendo el tiempo persiguiendo a algunos para aparentar que ahora sí las cosas van a cambiar. El cambio se va a demostrar en los hechos. Ya no va haber esa parafernalia, todos esos desplantes que tienen que ver con la demagogia. Vamos a actuar con seriedad, vamos a inaugurar una etapa nueva en la vida pública de México.
Ayer López Obrador viajó a Puerto Escondido, donde lo esperaban indígenas de Pochutla, Río Grande, Puerto Ángel, San Pedro Mixtepec, Juquila y Temascaltepec. Los mayordomos de los pueblos de la costa oaxaqueña le entregaron el bastón de mando y mujeres de la región Mixteca tres collares de flores.
Al subir al templete, observó aquella multitud de pobres que le gritaban: ¡Ya llegó, ya está aquí, el que va a chingar al PRI!, ¡Esta vez no nos roban los votos!, ¡Somos la prole, pero con nosotros vamos a ganar!
La temperatura no amilanó a nadie en el multitudinario encuentro. López Obrador habló durante 52 minutos para exponer su postura frente a la institución armada:
“Quiero aprovechar en la costa de Oaxaca para mandar un mensaje a todos los soldados y marinos de México: consideramos que los soldados es pueblo uniformado, es el mismo pueblo. No tenemos nada contra de esa institución que es fundamental para la República. No tenemos ningún problema.
Y quiero recordar que en 2006 la mayor parte de los soldados votó por nosotros y así va a volver a suceder. Para que quede esto muy claro: no tenemos enemigos, ni queremos tenerlos; si acaso tenemos adversarios, pero están muy arriba, pero no están aquí, están arriba. Muchos ni siquiera viven en México, se la pasan en el extranjero; pero tampoco los odiamos; lo que nosotros buscamos es justicia, no venganza.
El mensaje del candidato presidencial redundó en la necesidad de lograr la transformación de México a pesar de enfrentar a un grupo de interés muy poderoso.
“Queremos un verdadero cambio, no engañar con el gatopardismo, que consiste en que las cosas en apariencia cambian para seguir igual. Un cambio que haremos es combatir la monstruosa pobreza y desigualdad social que hay en el país.
Hablo de una transformación porque lo comprende todo: es lo económico, lo político y lo social, y también significa fortalecer valores culturales, morales y espirituales. Esto no es maquillaje, no es paños calientes, no es remiendo, no es por encimita. Vamos a cambiar realmente las cosas. Vamos a poner la honestidad por delante, se va a convertir en una forma de vida, de gobierno.
A pesar del entendimiento entre la multitud y el candidato, la presencia en el templete de dos personajes propició enojo y reclamos entre los indígenas: ¡Rateros, corruptos!, gritaban al candidato al Senado, Benjamín Robles Montoya –vinculado a Víctor Manuel Tinoco Rubí, ex gobernador de Michoacán, a quien sirvió para operar un centro de espionaje–, y a Abraham Ramírez Silva.
A quien sí reconoció López Obrador fue al gobernador: Gabino (Cué) está haciendo las cosas de acuerdo a sus posibilidades, porque si no se gana arriba es muy difícil que las cosas mejoren para el pueblo, por mucho que quiera hacer un gobernante para el pueblo; por eso se requiere ganar la Presidencia de la República.
Antes de salir de la unidad deportiva, López Obrador fue despedido por cientos de personas que intentaban acercarse a él. Los que no lo lograron le gritaban: Regresa, presidente.
Contribuyendo a la causa-Magú
Elecciones 2012
Plantea aplicar otra estrategia para combatir a la delincuencia
No habrá pactos con el narcotráfico, dice AMLO al llamado de Calderón
Claudia Herrera
Periódico La Jornada
Jueves 24 de mayo de 2012, p. 13
La lucha contra la delincuencia seguirá con una estrategia distinta, sin pactos con el narcotráfico ni ocurrencias, respondió Andrés Manuel López Obrador al emplazamiento que lanzó el presidente Felipe Calderón a los candidatos para definirse sobre el tema.
El abanderado del Movimiento Progresista consideró positivas las indagaciones en Estados Unidos sobre los presuntos nexos de Tomás Yarrington, ex gobernador de Tamaulipas, con el narcotráfico, porque no hay momentos de veda, aunque se haga campaña para combatir actos de corrupción.
Este hecho es fruto de un régimen podrido y de corrupción, consideró. Y cuando le preguntaron si su contendiente priísta, Enrique Peña Nieto, deberá deslindarse del ex mandatario estatal, respondió: Pero cómo le va a hacer, si él le levanta la mano a Yarrington, como se la levanta a (Humberto) Moreira; él puso a Moreira en el PRI, es lo mismo.
En conferencia matutina, dejó en claro que mientras la Policía Federal no esté capacitada, el Ejército seguirá en las calles. Si se retira, se dejaría a la gente en estado de indefensión.
Acotó que aplicará otra estrategia que atienda las causas sociales. No vamos a declarar la guerra. Vamos a serenar el país. Voy a garantizar que haya tranquilidad para todos los mexicanos desde los primeros días.
Declaró que está en contra de pactar con el narcotráfico, pues tiene que haber una frontera, una línea divisoria entre autoridad y delincuencia. Para enfrentar al crimen organizado, dijo, más que fuerza se requiere inteligencia y no sacar a la calle soldados sin ton ni son, como hizo el actual gobierno, que le dio un garrotazo a lo tonto al avispero.
Insistió en que si gana la Presidencia hablará con gobernadores y alcaldes desde las 6 de la mañana, y recomendó a la prensa investigar cuántas veces lo hace Calderón.
Además, preguntó: “¿Creen que algún día se reunió Peña Nieto con su gabinete de seguridad para preguntarle cómo estaba la delincuencia en Chimalhuacán, en Nezahualcóyotl o en Ecatepec? No. Él se levantaba a jugar golf y a hablar con los directivos de Televisa para decirles: ‘cómo vamos y vamos a seguir adelante con la publicidad’”.
Espino y Peña son lo mismo
López Obrador sostuvo que el respaldo del ex dirigente del PAN Manuel Espino a Enrique Peña Nieto no es novedad, porque son lo mismo. Recordó que en 2006 se dieron a conocer unas grabaciones donde el delegado del PRI en Chiapas hablaba con Espino, presidente del PAN, y hablaban de que estaban reuniendo dinero para apoyar en Chiapas la alianza PRI-PAN, y en esa conversación se menciona a Enrique. Espino habla y dice: ya hablé con Enrique, va a ayudar también. Algo así.
Presagio-Hernández
¿De qué se quejan?
Adolfo Sánchez Rebolledo
 
      Entre algunos de los críticos de la izquierda corren versiones estrafalarias acerca del origen de la protesta estudiantil. Son los viejos reflejos del poder que rechazan como una anomalía incluso las mínimas respuestas de sobrevivencia. Temen que el entusiasmo de la juventud se convierta en un capítulo negro de la desilusión nacional. Pero no se atreven a decir que sin un cambio de fondo, nuestra juventud, ésta, la que vive hoy, carece de futuro. ¿Qué pueden esperar los jóvenes si de los cuatro candidatos tres de ellos coinciden por sobre todas las cosas en la agenda de reformas estructurales que pide el calderonismo pero comenzaron sus antecesores en Los Pinos? ¿Cómo mirar con serenidad el porvenir si el PAN y el PRI, tan distintos pero tan semejantes, comparten la misma visión de la economía y la distribución de la riqueza? ¿No es este el tema de esta sucesión presidencial en este 2012?
Ya dirán los nuevos gurúes de la comunicación si, y cómo, la guerra en el Twitter trascenderá o no de manera sensible a los resultados electorales, pero una cosa es innegable: el fenómeno marca tendencias, renueva la agenda de los aspirantes y obliga a un importante sector de la opinión pública a pronunciarse sobre asuntos de interés que permanecían soterrados, sujetos al control de daños de los partidos. En el caso concreto de Peña Nieto con los estudiantes de la Iberoamericana es falso decir que se impidió el debate, pues más allá de las descalificaciones impropias (y de las falacias esgrimidas para salvar la cara en el tema de Atenco), lo verdaderamente nuevo y destacable es la inesperada irrupción en la escena electoral de una ciudadanía juvenil tan firme como inesperada. Ese es el saldo prometedor de estas inusitadas jornadas. Al igual que ha ocurrido en otras partes del mundo, aquí también destaca el uso de las redes sociales como el medio privilegiado para realizar una convocatoria que no sigue los trillados caminos de la política tradicional. Y de inmediato, para contradecir sus efectos, sale a relucir el cálculo inmediatista con afán de ninguneo. Se discute, como si eso fuera decisivo, que los tuiteros se representan a sí mismos y poco cuentan a la hora de las encuestas y otras mediciones (por lo visto la experiencia global no dice nada). Pero se olvida la cuestión esencial: en la protesta, como ya se dijo arriba, se expresa el hartazgo y la indignación de los jóvenes ante una situación que mina la confianza en el presente y anuncia tiempos oscuros para mañana. Es un asunto de conciencia, no de adscripción clasista como fantasean los críticos. E incluso en esto hay nuevos elementos que vale la pena considerar, pues la reacción no se ha quedado en la expresión del malestar hacia la clase política (muchos menos al discurso de odio) como lo entendieron los anulistas en las pasadas elecciones federales, sino que esta vez las baterías de la irritación se han dirigido contra dos símbolos del intocable orden vigente: el candidato del Partido Revolucionario Institucional y las empresas que dominan el mercado de los mass media, Televisa y Televisión Azteca, a las que se considera como los verdaderos fabricantes (o partidos sin registro detrás del trono formal) del juego mediático que mantiene a Peña Nieto a la cabeza de las preferencias. Esta diferenciación de las fuerzas de la llamada clase política (que es una simplificación útil para dominar sin verdaderos partidos), más la idea de no cederle a otros el derecho a participar y decidir, son, a mi modo de ver, grandes avances, pensando en la realidad electoral de hoy, pero sobre todo en la futura reconstrucción del régimen político.
No es una exageración decir que la campaña electoral por la Presidencia era una antes del debate y otra muy diferente la que observamos tras los hechos de la Ibero. La reacción estudiantil ante la manipulación informativa de la que fue objeto es un hito en la medida que al frustrar la opacidad dejó de ser la coartada de la indiferencia. Pero hay algo más que se ha expresado en las movilizaciones de la última semana: la oposición a la vuelta del PRI proveniente de las capas ilustradas es la quiebra del apoyo que tuvo en el pasado el panismo. Como si con ello se le diera prisa al trámite, ninguno menciona al Presidente que va de salida y la candidata Vázquez Mota no puede, por mucho que sonría, capitalizar el descontento surgido en su universidad. Y es que los tiempos sí cambian, y en serio. La alternancia blanquiazul murió con la crisis de 2006. Así, el rechazo a Peña Nieto viene a ser la primera línea de resistencia de una movilización cívica que en los hechos ha renunciado a la antipolítica pero aún no dispone de las formas adecuadas para intervenir en la escena pública. Imbricada con ella está una segunda corriente que pide no desperdiciar el voto y se pronuncia por apoyar a López Obrador. Hablando de los estudiantes, son aquellos que lo recibieron en los auditorios escolares, dialogaron y perdieron el miedo a mantener una postura propia. Muchos de ellos marcharon por las calles dando la cara y se reunieron en el Zócalo sin el candidato en un acto sin precedentes. Una parte de ese contingente también se hizo presente en la Plaza de las Tres Culturas que vino a sellar el punto de encuentro del candidato progresista con esos grupos movilizados de la juventud mexicana. Sin duda hacía falta esa iniciativa fresca, ciudadana, para darle a la izquierda el impulso que necesitaba la campaña.
Me quedo con el gesto de los estudiantes afrontando con valor cívico las acusaciones de que eran infiltrados de la izquierda para reventar el acto de Peña Nieto. En un país donde se gratifica el cinismo y se premia la ausencia de convicciones, esas actitudes tienen que destacarse.
Puntualización-Fisgón
Astillero
Golpe electoral en inglés
EU paga a FC
Dinosaurio pachecón
Al Ángel de la Democracia
Julio Hernández López
Foto
FILMAN ELOGIOS A PEÑA NIETO. Jóvenes de la campaña de Enrique Peña Nieto en Querétaro solicitan a transeúntes hablar a favor del candidato presidencial con la promesa de salir en un video promocional
Foto Agencia Obtura
 
         El muy anunciado guión del felipista golpe electoral narcotraficado contra el PRI llegó en inglés, sin novedades en cuanto a los papeles estelares y muy a tiempo para intentar el difícil rescate de una falsa heroína de apellido Mota (doble gulp con copia a la DEA). Largamente tolerado por la fallida Santa Inquisición panista (Fox nada le hizo, y Calderón tampoco intentaría nada en contra de él si no estuvieran de por medio las elecciones presidenciales) y plenamente apapachado hasta ayer por sus congéneres priístas, Tomás Yarrington fue finalmente acusado de lo que todo mundo en las alturas del poder sabía pero no se quería o no convenía confirmar.
El salinista Manuel Cavazos Lerma cedió la silla gobernante a Tomás Yarrington que dejó como sucesor en el negocio a Eugenio Hernández Flores que pretendió dejar como heredero a Rodolfo Torre Cantú que fue impunemente asesinado por un comando quirúrgico a días de las elecciones en las que fue relevado por su hermano Egidio que vive blindadamente remontado en algún lugar de las montañas burocráticas de Tamaulipas donde el verdadero poder está en las mafias de siempre ahora divididas (los Zetas ya no quisieron seguir siendo el dependiente brazo armado del cártel del Golfo luego de la detención de Osiel Cárdenas), pero finalmente titulares de los poderes ejecutores, legisladores y judiciales de una entidad sustraída a lo institucional como es la ensangrentada Tamaulipas, donde no se permiten ni la crítica ni la protesta social o política ni el ejercicio siquiera del periodismo tradicional, porque en esa tierra norteña desde hace mucho no hay ni ha habido gobernadores ni política, sino solidarios administradores partidizados del negocio por todos tan sabido y tan disputado.
Sobre ese material de contaminaciones múltiples se ha montado la voracidad electoral del calderonismo para arremeter contra el candidato del cártel de gobernadores y ex gobernadores que mucho se han beneficiado del negocio antes mencionado (aunque no sólo los de tres colores: panistas también han destacado en el acoplamiento con los bandos realmente dominantes de sus entidades, como puede verse en Morelos y Baja California, al igual que sucedió en Michoacán y Zacatecas con el perredismo respectivamente godoyista o amalista). Hoja tras hoja se cumple la trama: desde los amagos de sujeción a territorio nacional de los eventuales viajeros internacionales de apellidos Yarrington, Hernández Flores y Cavazos Lerma, hasta el puntualísimo banderazo de salida de la temporada de caza del dinosaurio pachecón que realizó el desesperado Felipe el martes pasado al irrumpir en el escenario electoral para exigir a los candidatos presidenciales que definieran si iban a continuar su guerra contra el narcotráfico, es decir, si apoyarían las medidas extremas presuntamente salvíficas o entrarían en arreglos con los malos para restablecer la paz mafiosa. Horas después del relámpago calderonista llegó la texana lluvia fuerte que apenas se refiere a los asuntos inmobiliarios del archimencionado Tomás pero que ya anuncia tormentas judiciales específicas contra la sección tamaulipeca de la gran compañía tricolor que sueña con regresar a Los Pinos detrás de un copete desde ahora tan despeinado.
La guerra se ha desatado y Peña Nieto trata de zafarse de las figuras quemantes aunque suficientes testimonios hay de la cercanía de Yarrington con él (como, en su momento, con George W. Bush, de quien luego era invitado especial en Texas). Pedro Joaquín Coldwell quema las de por sí pocas reservas políticas que le quedan, luego del episodio de la Ibero, apresurando desconocimientos y expulsión de quien horas antes de la intervención electoral gringa en favor del aliado Calderón era un distinguido priísta en virtual fuga. Peña Nieto sufre (foto con TY en http://bit.ly/MpGkxQ y nota en Apizaco, Tlaxcala, el 31 de enero de este año, deplorando el uso politizado de las indagaciones contra personajes tamaulipecos). Y Felipe y Josefina creen llegado el momento del asalto final contra el priísmo narcotizado, en uno más de los lances de fin de fiesta que (otro más, el de los generales presos) van tensando cada vez más el proceso electoral en el que, esta vez, los gringos están votando.
En tanto, estudiantes de universidades públicas y privadas marcharon ayer del símbolo de la corrupción calderonista, la Estela de Luz, al Ángel de la Democracia (también denominado de la Independencia) y de allí unos retornaron al punto original de manifestación y otros se dirigieron a Televisa Chapultepec. El movimiento de insurgencia juvenil enfrenta la taimada pretensión de la principal televisora de aplicarles una especie de judo electrónico, dándoles espacio comprensivo en espera de errores, violencia, divisiones o impericia que puedan ser aplicados en contra de esos mismos jóvenes que así pasarán de ser bienvenidos opinantes frescos a manipulados y partidizados corruptores de tan bonito capullo cívico al que Televisa le ha querido poner su florero de moda. Por ello, algunos dirigentes de la marcha estudiantil insistieron en precisar puntos en la sede informativa del poder de las cámaras.
Astillas
Publicado ayer en El Mexicano, de Baja California (http://bit.ly/JrwdXw ): Diversas anomalías se han presentado en los últimos meses en la expedición de credenciales del Instituto Federal Electoral en Playas de Rosarito, donde por lo menos medio millar de identificaciones oficiales entregadas por el organismo presentan irregularidades en su domicilio... Los fotógrafos de Obtura captaron http://bit.ly/Kqqjbf ) que en Querétaro un grupo de jóvenes vestidas con ropa de campaña de Peña Nieto solicitaban a los transeúntes que hablaran (con guión) a favor del candidato presidencial EPN con la promesa de salir en el video promocional de ese candidato... Y, mientras la volatilidad política y electoral se une a las incertidumbres europeas y lleva al peso por encima de los 14 por dólar, ¡hasta mañana, con la detención del presunto asesino de Brad Will, que parece que no se llama Ulises!
Twitter: @julioastillero
Facebook: Julio Astillero

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