Alianza Social de Trabajadores de la Industria Mexicana

miércoles, 5 de septiembre de 2012

Tragedia, frivolidad, justicia- ¿Cooperación o entreguismo?- BAJO LA LUPA

Tragedia, frivolidad, justicia

Adolfo Gilly
Foto
Adolfo Gilly, Trinidad Ramírez, Joel Ortega, José (de Cherán) y Luis Hernández Navarro, durante el foro Diálogo académico y con la sociedad civil sobre el contrainforme, celebrado en la Facultad de Economía de la Universidad Nacional Autónoma de México
Foto Yazmín Ortega Cortés
1. Tragedia
Monseñor Raúl Vera, obispo de Saltillo, en su incansable clamor por la justicia, dice hoy en La Jornada que el gobierno de Felipe Calderón se va con cerca de cien mil cadáveres espacidos por todo el territorio, decenas de fosas clandestinas, cerca de cuarenta mil desapariciones forzadas, doscientos mil desplazados, encarecimiento de los alimentos, fuga de capitales y venta de empresas mexicanas al capital extranjero.
Esta tragedia mexicana no es un azar del destino. Tiene al menos dos propósitos.
Uno, contribuir a mantener una de las industrias de exportación más rentables, el narcotráfico, y con ella las redes financieras locales e internacionales que la sirven, la encubren y sacan de ella sus propios y grandes beneficios.
El otro, sembrar el miedo, la indefensión y la desorganización en el pueblo mexicano para imponer las llamadas reformas estructurales, cuyo objeto es terminar de convertir en valor de cambio, en mercancías, en fuente de dinero para pocos y no de disfrute y vida para todos, nuestros trabajos, nuestra educación, nuestra salud, nuestras vidas y todas las riquezas naturales de México: las tierras, las aguas, los bosques, el suelo y el subsuelo y hasta el aire mismo con sus plantas eólicas.
De la indignación moral contra esta tragedia nació en la Ibero, el viernes 11 de mayo de 2012, el #YoSoy132. Otra vez los estudiantes se aparecieron a desordenar lo que bien planchado estaba y a informar lo que estaba desinformado. ¡Caramba y zamba la cosa, que vivan los estudiantes!, cantaba Violeta Parra.
¡Bienvenidos sean, y larga y sorpresiva vida al movimiento y a su inventiva!
2. Frivolidad
Mientras los estudiantes, lo mismo que Javier Sicilia y los movimientos que se organizan y actúan en todo el territorio nacional –Cherán, Atenco, Wirikuta, la Policía Comunitaria, las Juntas de Buen Gobierno zapatistas, los mineros, los electricistas y tantos y tantos más– enfrentan esta tragedia cada uno en su lugar y con su modo, la respuesta desde los gobiernos es la frivolidad y la amenaza, y desde muchos políticos el desconcierto y el pasmo.
El primer mensaje de Enrique Peña Nieto como presidente entrante, ante el escenario de destrucción que el que se va nos deja, es un discurso frívolo. Por eso mismo es conveniente tomarlo en serio. Mencionaré aquí tres de sus propuestas.
Nos dice Enrique Peña Nieto que se propone transformar una democracia esencialmente electoral en una democracia de resultados. Como ustedes bien saben por sus estudios, el pragmático y empresarial atributo resultados nada tiene que ver con el sustantivo democracia. Es un vocablo del pensamiento empresarial. Claro y coherente era, en cambio, el lema del Plan de Ayala, cuya demanda republicana fue libertad, justicia y ley. Sigue vigente para todos nosotros.
Tenemos playas, mares y litorales, tenemos valles y extensas planicies que deben ser espacios de verdadera oportunidad para nuestra gente, dice después ese mensaje.
México cuenta con bellezas naturales y culturales suficientes para convertirse en potencia turística global.
Sí, todo eso existe en México y es patrimonio común de vida y disfrute del pueblo mexicano, y no un espacio de verdadera oportunidad para muchos o para alguno. Espacios de oportunidad es lenguaje empresarial, amenazante para esos bienes nuestros que ahora los ven como nuevos espacios de despojo.
Más claro aún: esas bellezas naturales, dice Peña Nieto, permitirán a México convertirse en una potencia turística mundial. El sustantivo potencia se da de patadas con el adjetivo turística, pero esto es lo menos. Lo de más es que el presidente entrante se propone poner a la venta ese patrimonio y convertir a la naturaleza en valor de cambio en el mercado y no en valor de uso, de vida y de disfrute de los habitantes de la nación mexicana.
Enrique Peña Nieto también nos dice que vamos a ser protagonistas globales, preparando y educando a las nuevas generaciones para triunfar en cualquier lugar del mundo. Es la propuesta de un funcionario que no sabe el precio de la tortilla y del boleto de Metro ni el monto de los salarios mínimos ni los terribles índices de la pobreza ni los estragos de la guerra de Calderón.
La idea de educar a los jóvenes mexicanos para triunfar en cualquier lugar del mundo parece surgida de la mente de un publicista de universidad patito. Conocemos los índices de exclusión educativa a nivel universitario: los cientos de miles de jóvenes que, teniendo derecho y capacidades, no tienen acceso cada año a la educación superior; y las enormes deficiencias en recursos, instalaciones y hasta nutrición de la educación primaria y secundaria.
¿Cómo puede el nuevo presidente hablar de educar para triunfar en cualquier lugar del mundo? Ustedes, estudiantes, lo saben bien: está hablando para una juventud dorada de hijos de ricos, esos que nos llaman la prole y creen que el título se paga, no que se alcanza con trabajo, estudio, tenacidad y experiencia aprendida en la práctica del conocimiento.
Este es el pensamiento frívolo del presidente que nos han heredado una elección comprada y la falsa justicia de los magistrados del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación. Este es, en efecto, un tipo de democracia que en verdad da resultados, dirán los miembros del Consejo Mexicano de Hombres de Negocios, uno de cuyos empleados bien podría haber escrito este primer mensaje presidencial.
3. Justicia
El Movimiento Progresista tiene razón en denunciar el fraude e impugnar ante la justicia la validez de la elección presidencial. Tiene razón también en señalar la prevaricación del alto tribunal electoral. Lo que no resulta tan coherente es por qué sólo se impugna la elección presidencial y se dan por válidos todos los demás resultados de la jornada electoral, falseados por la misma operación de compra de votos y de coacción clientelar de los votantes. Es desafiar a medias y aceptar a medias el resultado del fraude.
Pero más allá de esta incongruencia, que como ya sucedió en 2006 deja abierta una línea de falla y de litigio, un hecho es evidente: quienes con razón reclamaron su derecho ante la justicia electoral no encontraron jueces probos ni justicia legítima.
Pero ¿encuentran esa justicia los mexicanos y las mexicanas cada vez que son victimas de una agresión, un agravio, un despojo, una violación, un crimen de sangre o un atropello pequeño o grande de la autoridad? ¿Encuentran justicia en un país ocupado por sus propias fuerzas armadas? ¿Tienen a quien acudir las víctimas de la tragedia de este sexenio funesto?
El clamor de justicia en México es inconmensurable. Piden justicia Cherán, Ayotzinapa, Guerrero entero, Veracruz, Chihuahua y todos los estados de la dolida geografía mexicana. Piden justicia los movimientos indígenas y campesinos. Piden justicia los zapatistas y el entero pueblo chiapaneco, los pobladores de Cherán y de Atenco, los trabajadores despedidos, las víctimas de las catástrofes mineras, los cientos de miles de víctimas del terror desatado por Felipe Calderón y los suyos.
Justicia es un clamor nacional que en la desvaída campaña electoral sólo se empezó a escuchar de verdad ese viernes 11 de mayo, cuando ustedes en la Ibero, al grito de Atenco no se olvida, se rebelaron contra la represión, la injusticia y la mentira.
La justicia no empieza por la promesa escrita en un programa, sino por la denuncia, la indignación y la pelea en los casos de la vida real, poniendo el cuerpo y alzando el grito en la denuncia.
La justicia empieza por el conocimiento y la divulgación de la injusticia. Empieza por conocer, saber e informar al país cada injusticia, como lo han hecho quienes han asumido como personas o como organizaciones esa ardua tarea. La ausencia de justicia está encubierta y legitimada por el monopolio de la información. Antes que esos jueces infidentes, Televisa y TV Azteca son los fabricantes y los encubridores de la injusticia.
El gran malentendido del inicio de la campaña electoral con el apretón de mano a Joaquín López Dóriga y con él a su empresa, fue roto por ustedes ese 11 de mayo y con todo lo que después vino en las calles y plazas. La temporada electoral culminó en el cerco estudiantil a Televisa. Así cambiaron el panorama de la elección y hasta sus cifras finales.
Esa es conquista del movimiento estudiantil. No salió a pelear por partidos y promesas sino contra el escudo de la injusticia: Televisa y TV Azteca, el monopolio de la información, la expropiación del conocimiento, la mentira organizada y tecnificada. Es la enseñanza más preciosa del movimiento: saber, conocer, investigar, denunciar e informar al pueblo la injusticia y la depredación de esos que usurpan el gobierno y ejercen el poder.
Tenemos ahora por delante una embestida contra nuestros derechos y nuestras vidas que ya se apresuró a desatar Felipe Calderón con su proyecto legal de desmantelamiento de los derechos y conquistas de los trabajadores y sus organizaciones. Promete además Enrique Peña Nieto reforma energética: privatización abierta o encubierta de Pemex y el petróleo, propiedad inalienable de la nación, y apertura del territorio a la depredación de la megaminería; reforma fiscal: IVA a alimentos y medicinas, exenciones impositivas a los ricos; reforma educativa: exclusión para unos y privatización para otros, esos que, dice él, van a triunfar en cualquier lugar del mundo. Ante estos desafíos está hoy el movimiento #YoSoy132.
* * *
No se trata en cada movimiento de hacer un programa nacional, unos estatutos, una institucionalización. Son tareas de otros. Es mejor y más vivaz mantener el alerta y la pronta respuesta y, en medio de la vida de estudio, trabajos y disfrute que nos reúne, hacer propias las grandes causas de este pueblo; disputar cada día la información; usar la cultura y los conocimientos científicos y tecnológicos que las universidades nos dan, no para triunfar en cualquier lugar del mundo, sino para enfrentar y desconcertar a los agentes y los voceros de la injusticia y el despojo, y para defender y difundir todas y cada de las causas de la justicia y la libertad.
Auditorio Narciso Bassols, Facultad de Economía, UNAM, 4 septiembre 2012.
Ahí te lo dejo-Ahumada
¿Cooperación o entreguismo?


A 10 días de los incidentes ocurridos en la localidad de Huitzilac, Morelos –donde elementos de la Policía Federal agredieron a tiros una camioneta diplomática en la que viajaban dos agentes estadunidenses y un oficial de Marina–, la titular de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), Patricia Espinosa Cantellano, sostuvo que la relación bilateral entre México y Estados Unidos no ha sido afectada por ese episodio, y celebró que los casos complicados –entre los que incluyó también la operación Rápido y Furioso–, que en otro tiempo tendían a convertirse en crisis generalizada en la relación, se resuelven ahora con base en la cooperación y la apertura entre las autoridades de ambos países.
A renglón seguido, Espinosa Cantellano justificó la presencia de elementos estadunidenses en territorio nacional, la cual, indicó,tiene que ver con la cooperación con Estados Unidos en materia de seguridad, un rubro importante en nuestra relación bilateral.

Es significativo que los sucesos aludidos ayer por la canciller para ilustrar la madurez y la apertura de la relación bilateral –el ataque en Huitzilac y la operación Rápido y Furioso– sean dos de los botones de muestra más sólidos de la creciente injerencia política, policial, militar y de inteligencia de Washington en nuestro país, la cual ha sido documentada de diversas maneras: desde los cables diplomáticos filtrados por Wikileaks, y difundidos por La Jornada, hasta las versiones periodísticas –publicadas inicialmente por este diario y confirmadas por medios estadunidenses– de que los funcionarios estadunidenses atacados el pasado 25 de agosto no eran empleados de la embajada de Washington, como se señaló en un principio, sino agentes de la CIA.
Así pues, la titular de la SRE hace un flaco favor a la administración a la que pertenece al exaltar una cooperación bilateral que, en todo caso, ha dado pie a situaciones a todas luces anómalas –la operación de agentes extranjeros en territorio nacional– y a prácticas abiertamente ilegales, como el abastecimiento de armas a las organizaciones criminales en México mediante Rápido y Furioso y Receptor abierto, o las operaciones de lavado de dinero efectuadas por la DEA en el supuesto marco de acciones de inteligencia.
En un contexto de plena normalidad institucional y vigencia del estado de derecho, esas y otras situaciones habrían derivado, si no en episodios de crisis generalizada en la relación, sí al menos en reclamos inequívocos y enérgicos del gobierno mexicano al estadunidense, y en la correspondiente revisión a fondo de los ejes rectores y la dinámica de la relación bilateral. En el México actual, sin embargo, la falta de roces diplomáticos con Washington no deriva precisamente de los buenos oficios de la presente administración federal, sino de su falta de voluntad para reaccionar a los diversos abusos, intromisiones y presiones injerencistas de los emisarios de la Casa Blanca en nuestro país.
Tanto más grave resulta que esa circunstancia, contraria a la soberanía nacional y a los preceptos constitucionales vigentes, haya sido alentada y promovida por el propio gobierno federal y ahora, para colmo, pretenda presentarla como parte de la normalidad institucional, e incluso como un componente deseable de la relación bilateral, como quiso hacerlo la titular de la SRE en su discurso de ayer: dicha actitud no sólo exhibe el espíritu de sumisión y entreguismo que ha caracterizado a la administración federal saliente, sino erosiona el imperio de la legalidad y el orden constitucional en el país.
ÇBajo la Lupa
La desnuclearización de Medio Oriente: propuesta de la Cumbre de los No Alineados
Alfredo Jalife-Rahme
Foto
Activistas cubiertos con sábanas representan cadáveres, durante una protesta contra la posible confrontación de Israel con Irán por su programa nuclear, frente al Ministerio de Defensa, en Tel Aviv, el 23 de agosto
Foto Ap
Además de la inesperada resurrección del Movimiento de los No Alineados (MNA: 120 de los 193 países de la ONU y 55 por ciento de la población mundial) celebrada en Teherán y a la que acudió en forma impactante el secretario general de la ONU –Ban Ki-moon–, al unísono del nuevo ajuste geopolítico regional y de la imperativa formación de un nuevo bloque multimediático alternativo de carácter polifónico para contrarrestar la propaganda monofónica de la desinformación occidental (ver Bajo la Lupa; 2/9/12), fue lanzada la propuesta de la desnuclearización de Medio Oriente, lo cual ha puesto en la picota la posesión clandestina de un máximo de 400 bombas nucleares por Israel (según el excelso Boletín de Científicos Estadunidenses), que goza de selectivas canonjías celestiales al impedir el acceso de la Agencia Internacional de Energía Atómica (AIEA) y al rehusar con arrogancia firmar el Tratado de No Proliferación (TNP) de Armas Nucleares.
Curioso: la teocracia jomeinista de Irán, tan maltratada por la mendacidad unilateral de los multimedia occidentales, acepta las inspecciones de la AIEA y es firmante del TNP, mientras Israel se da el lujo de pontificar al mundo entero gracias al apoyo incondicional de la dupla anglosajona sometida al lobby israelí (ver libro El lobby israelí y la política exterior de EU, de los consagrados politólogos John J. Mearsheimer y Stepehen M. Walt), que, por fortuna, empieza a ser severamente cuestionado en los circuitos democráticos de Estados Unidos.
La trascendental cumbre del MNA puso el dedo en varias llagas del caduco orden unipolar, en especial, a mi juicio, el apartheid de la monofonía multimediática occidental.
Según el portal geoestratégico europeo Dedefensa.org (1/9/12), el presidente iraní Mahmud Ajmadineyad fue mucho más lejos de lo que se ha manejado en los multimedia regionales al proponer una portentosa cooperación colectiva con las estrategias necesarias que incluyan un fondo monetario (¡súper sic!), un banco (sic) y estructuras económicas y de seguros independientes (sic), mediante el diseño de nuevos métodos comerciales, que incluyan transacciones con divisas nacionales (¡súper sic!) y la eliminación de una divisa específica de las transacciones globales. ¿Se intensifica la guerra de divisas como reflejo del giro hacia el incipiente nuevo orden multipolar?
¿Se habrá percatado Ajmadineyad de que prácticamente el MNA, en caso de ser aceptada la audaz propuesta de liberación financiero-económico-mercantil del G-7/OTAN/Israel, estaría a punto de una rebelión multipolar en contra de la hegemonía israelí/anglosajona que impera desde la Segunda Guerra Mundial?
Por menos fueron defenestrados el iraquí Saddam Hussein, quien propuso la venta del petróleo en euros en lugar de dólares, y el libio Muammar Kaddafi (literalmente sodomizado por agentes de Estados Unidos, según el presidente ruso Vladimir Putin), quien había lanzado la temeraria idea de una divisa africana (el dinar oro) y un fondo monetario africano.
Claro: ni Saddam ni Kaddafi gozaban, como ahora el muy hábil Ajmadineyad, de la tácita aprobación del MNA de 120 países que, por la propia dinámica de los sucesos, aisló, en primer término, a Israel, y en segundo término a la dupla anglosajona EU/Gran Bretaña.
Los pretendidos aisladores acabaron aislados: esa puede ser la síntesis real de la cumbre MNA de Teherán.
Al centro geoestratégico europeo Dedefensa le pasmó la presencia notable de las seis petromonarquías del Golfo –incluyendo Arabia Saudita y Qatar– en la cumbre del MNA, que puede representar un punto de inflexión de la geopolítica regional y de su giro al incipiente nuevo orden multipolar.
El investigador estadunidense Wayne Madsen (Strategic-culture.org, 30/8/12) concede notable relevancia a la presencia de Arabia Saudita y aduce que, consecutivamente a la cumbre de la Conferencia de la Organización Islámica (OIC, por sus siglas en inglés: 57 países y mil 600 millones de feligreses), en el seno de la nueva fase del MNA se incrusta la sumatoria de varios bloques heteróclitos: Grupo de Shanghai, Unasur, Alba y los BRICS, quienes establecen una nueva alianza regional/global opuesta a la hegemonía EU/OTAN.
A juicio de Dedefensa, durante la cumbre del MNA surgió un expediente esencial (sic) relacionado en forma indirecta con el contencioso nuclear iraní: una zona desnuclearizada del Medio Oriente, idea que transforma en histérico (sic) absoluto al gobierno de Israel.
El presidente egipcio Mohamed Morsi, representante de los Hermanos Musulmanes, arremetió contra Israel y apoyó la postura iraní en su derecho a desarrollar su proyecto nuclear civil con propósitos pacifistas (sic) sin restricciones. El asombroso presidente egipcio criticó al régimen israelí por su rechazo a unirse al TNP y reclamó que Medio Oriente debe estar libre de armas nucleares.
En sincronía, los 17 países árabes miembros de la AIEA depusieron una moción (por iniciativa de Jordania) que acusa a Israel por su papel obstruccionista a una zona desnuclearizada. El embajador de Jordania en la AIEA, Makram Queisi, denunció a Israel de frustrar todas (sic) las iniciativas para liberar al Medio Oriente de armas de destrucción masiva, en particular las nucleares.
A juicio de Dedefensa, la lógica de la zona desnuclearizada es sin duda aquella que es capaz de reunir a los países árabes que tienen posiciones diferentes respecto a Irán y de resolver la crisis nuclear iraní de una manera constructiva para confrontar la hegemonía nuclear de Israel. No es poca cosa.
Dedefensa.org cita a la analista Sarah Marusek (de PressTV, 31/8/12), quien arguye que EU es el que está aislado y no Irán: en particular “EU y sus políticas halconescas (sic) con Israel han sido aisladas”, por lo que la reacción israelí a la cumbre MNA muestra que Tel Aviv tiene miedo porque sabe que Irán no está aislado.
Ap de Pakistán (30/8/12) resaltó la presencia del presidente Asif Alí Zardari –cuyo país es limítrofe de Irán y posee la bomba islámica financiada por Arabia Saudita–, lo cual, a mi juicio, edifica un andamiaje triangulado muy creativo entre la chiíta Teherán y el eje sunita Pakistán/Arabia Saudita.
El supremo líder persa, ayatola Alí Jamenei, tranquilizó las preocupaciones de Occidente sobre Irán y su programa nuclear civil: enfatizó la desnuclearización y arguyó que las armas nucleares no pueden garantizar la seguridad de ningún país. Volvió a reiterar que la Republica Islámica de Irán condena el uso de las armas nucleares y que los países deben beneficiarse de la tecnología nuclear civil pacífica. Especificó que la bomba nuclear es anti islámica.
El Medio Oriente entró a una decisiva bifurcación entre la postura de los óptimos geoestrategas de Estados Unidos –Irán debe poseer la bomba para el equilibrio nuclear en Medio Oriente, según Kenneth Waltz, Bajo la Lupa, 24/6/12– y la bomba pacífica lanzada por la cumbre MNA de Teherán para la desnuclearización de Medio Oriente. En cualquier opción, se rompe el monopolio nuclear de Israel, que impide la armonía regional.

No hay comentarios:

Publicar un comentario